Así, la madrugada de ayer fallecía en el Hospital Universitario Virgen Macarena de Sevilla, donde permanecía ingresado, un indigente de 78 años de edad, F. R. L, que había sido encontrado el martes "semi inconsciente" con heridas inciso contusas en el cuello y cortes en las manos en un barrio conflictivo de Guillena (Sevilla).
Fuentes de la Guardia Civil, que continúa investigando las circunstancias en las que se produjo el suceso, informaron de que entre las pesquisas se encuentran abiertas "todas las líneas de investigación, incluso que se haya autolesionado", además, algunos informes apuntan que esta persona "sufría ataques de epilepsia a menudo".
De este modo, la Guardia Civil anunció que este hombre, vecino de dicho municipio, falleció en la madrugada de ayer, aunque por ahora se desconoce la hora exacta de su muerte.
Una patrulla de la Guardia Civil localizó en torno a las 13,00 horas del martes a F. R. L. que yacía semi inconsciente en la zona conocida como Pabellón de la Vega, un barrio conflictivo de Guillena incluido en las rondas habituales de las Fuerzas de Seguridad.
Por su parte y en Málaga capital, un mendigo de 45 años era encontrado ayer muerto sin signos de violencia, aunque la policía está investigando el caso y está a la espera de los resultados de la autopsia.
Según informaron a Efe fuentes cercanas a la investigación, el cadáver fue hallado sobre las 06.00 horas arrinconado en los alrededores del Muelle de Heredia, cerca del centro de la ciudad.
Esta muerte se ha producido dos días después de que otro indigente fuese encontrado en el municipio malagueño de Fuengirola, con heridas en el cráneo por arma blanca, por las que permanece ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Carlos Haya. El herido, de 53 años, "está estable dentro de la gravedad, su evolución es buena y está consciente".
El pasado 11 de diciembre fue hallado el cadáver de otro indigente también en Fuengirola e igualmente presentaba heridas en el cráneo por arma blanca, aunque no ha trascendido si el hacha que fue encontrada cerca del cuerpo fue la empleada en el crimen.
La Policía investiga si la agresión sufrida por el indigente de 53 años se debió a un problema entre mendigos y estudia las coincidencias con el caso del indigente muerto el pasado 11 de diciembre.
Las fuentes añadieron que se trabaja en todas las vías y que están todas las posibilidades abiertas, aunque entre las primeras hipótesis que se analizan está la del problema entre integrantes de ese mismo colectivo de personas.
Este caso y el del fallecido el pasado 11 de diciembre tienen en común que se trata de dos indigentes que no habían planteado problemas y que destacaban por no ser conflictivos.
El ahora hospitalizado tiene heridas que pudieron ser causadas por un cuchillo o una barra con filo cortante y no está confirmado que sean de un hacha, mientras que en el caso del fallecido anteriormente aún está por determinar que el origen de la herida sea un hacha, aunque apareciera un arma así cerca del cadáver.
Sobre la posibilidad de que se trata de un ataque de algún cabeza rapada ("skin-head"), aunque las fuentes no lo descartan, apuntan que no se conocen casos en la zona de ese tipo.
El indigente herido no pedía dinero ni molestaba a los viandantes, frecuentaba el paseo marítimo de la referida localidad de la Costa del Sol y por la noche pernoctaba en un pasaje donde hay terrazas de bares.
Por su parte, el mendigo que murió tras ser agredido solía ir a un aparcamiento del centro de la ciudad.
