La Unión Europea (UE) sancionará el próximo lunes a una treintena de ciudadanos iraníes por la represión del régimen contra las protestas, aunque evitará designar a la Guardia Revolucionaria como organización terrorista, aseguraron diversas fuentes diplomáticas.
Será la cuarta ronda de sanciones que apruebe la UE contra Irán desde que el pasado mes de septiembre estallasen las manifestaciones contra el Gobierno tras la muerte de la joven Mahsa Amini, a quien la Policía de la Moral detuvo por llevar mal puesto el velo.
El Parlamento Europeo aumentó ayer la presión a los gobiernos de la UE para que designen a la Guardia Revolucionaria como organización terrorista, pero los ministros de Exteriores no darán el paso en la reunión que celebren el lunes en Bruselas porque, según las citadas fuentes, existen "problemas legales" al respecto.
Con el debate abierto en la capital comunitaria, el Parlamento iraní amenazó hoy con designar como grupos terroristas a los Ejércitos de los países europeos si la UE hace lo propio con la Guardia Revolucionaria, el cuerpo militar de élite iraní.
La Eurocámara también pidió ayer sancionar al líder supremo de Irán, Ali Jameneí, y a Raisí, junto a sus familias, además de castigar al fiscal general, Mohamad Jafar Montazeri, como responsables de la represión de las protestas en el país, que ha causado casi 500 muertos y cerca de 20.000 detenidos, según oenegés establecidas fuera de Irán.
A ello se suma la ejecución de cuatro manifestantes, una de ellas pública, y sentencias a la horca de al menos 17 personas.
Tras estas ejecuciones, las protestas en Irán han perdido fuerza y en las últimas semanas apenas hay movilizaciones en las calles.
En las tres rondas anteriores de sanciones, la UE sancionó, entre otros, al jefe la Policía de la Moral, Mohammad Rostami Cheshmeh Gachi, y al ministro del Interior de Irán, Ahmad Vahidi.
Ninguno de ellos puede entrar en la UE y tienen congelados sus bienes y activos en los países del club comunitario.
