Pero desde este colectivo dejaron claro que la convocatoria había sido “espontánea” y que Democracia Real Ya no era la organizadora. De nuevo, al igual que en la manifestación de Sevilla, la diversidad era la nota predominante, aunque siempre con una elevada presencia de jóvenes, que fueron tomando la palabra, ampliando su voz por un altavoz, para expresar sus ideas, rabia e indignación.
La concentración acabó alrededor de las diez de la noche, aunque una nueva convocatoria de acampada para hoy podría ser más numerosa: “Porque no nos pueden pedir austeridad desde sus Mercedes Clase A, mañana estaré en #acampadasevilla”, rezaba uno de los twits.
Acampada en Madrid
En la madrugada del lunes al martes la Policía Nacional desalojó a los jóvenes que acampaban en la Puerta del Sol de Madrid. El Gobierno dio orden de desalojar cualquier nuevo intento de de acampada. Pero miles de jóvenes comenzaron a llenar la emblemática plaza madrileña. Al cierre de este periódico seguía abarrotada.
El desalojo, lejos de evitar las protestas, volvió a avivar la mecha que se encendió el pasado domingo. De nuevo, las movilizaciones comenzaron a multiplicarse por toda la geografía española.
La palabra “Encarnación”, lugar elegido para la protesta sevillana, entró en Trend Topic español, es decir, en una de las palabras más usadas en Twitter.
En diferentes twitts se informó de que ya se habían pedido los pertinentes permisos para realizar la acampada, aunque la superficie del las ‘setas’ es gestionada por la empresa Sacyr.
La evolución de la protesta dependerá de varios factores. Entre ellos que haya o no desalojo en Madrid. También de que los universitarios y enseñanzas medias decidan unirse a la movilización que muy probablemente siga hoy.