El Grupo Municipal Socialista ha mostrado su indignación por la “falta de criterios” del equipo de Gobierno de Marín respecto a la concesión de equipamientos públicos. Y es que, según ha podido comprobar en el acta de la Junta de Gobierno Local del pasado 21 de diciembre, el Ayuntamiento ha aprobado los pliegos de condiciones de las concesiones de tres chiringuitos en el paseo marítimo de la playa de La Barrosa, que se licitarán por un plazo de diez años más otros cinco prorrogables por una cuantía anual de 15.000 euros por cada chiringuito, lo que supone tan solo 11.000 euros menos que la parcela de más de 40.000 metros cuadrados para el colegio privado en el Novo Sancti Petri.
“En el Pleno de septiembre se aprobó con los votos de PP y PVRE ‘regalar’ una parcela en el Novo valorada en 5,8 millones de euros (casi 1.000 millones de las antiguas pesetas) por un canon anual de tan solo 26.000 euros, lo que vimos que olía mal”, ha recordado el concejal Antonio Pérez Noria, quien ha añadido que “en aquel momento, las explicaciones del Gobierno para llevar a cabo esta ‘cesión encubierta’ era el interés del Ayuntamiento por dar uso a una parcela destinada a equipamiento cultural y educativo”.
Sin embargo, el equipo de Gobierno de Marín aprobó el 21 de diciembre sacar a licitación el arrendamiento de tres chiringuitos en el paseo marítimo, que apenas supera los 200 metros cuadrados cada uno, por un mínimo 45.000 euros anuales entre los tres, es decir, casi el doble de canon anual que la parcela de 40.000 metros cuadrados del Novo para un colegio de élite. “Por si fuera poco, hay que recordar que la adjudicataria de la parcela del Novo no tiene que pagar por el canon anual durante los primeros cuatro años, mientras que en el caso de los chiringuitos deben hacerlo en el mismo momento de formalizar el contrato de arrendamiento”, ha aclarado.
“Por cierto, todo el mundo sabe cómo está la situación de la hostelería en la zona de la costa y a nadie se le escapa que los chiringuitos apenas tendrán una explotación anual superior a los siete, lo que implica que durante casi la mitad del año el empresario apenas obtendrá ingresos”, ha explicado Pérez Noria. “Por ello, se puede comprobar claramente cómo este Gobierno municipal actúa de forma muy diferente respecto al colegio privado del Novo. Lo lógico es lo que ha sucedido con los chiringuitos y no lo que pasó con la parcela del Novo, por lo que algo sigue oliendo mal en este último caso”, ha insistido.
Por otro lado, el edil del Grupo Socialista ha recalcado que, “tal y como ya dijimos meses atrás, los criterios de valoración también distan mucho entre unos equipamientos y otros, puesto que en el caso de la parcela del Novo la puntuación por mejoras económicas apenas era de cinco puntos sobre 100, mientras que en caso de los chiringuitos se podrá obtener hasta 35 puntos (uno por cada 500 euros de mejora) más otros 20 por mejoras económicas para renovación y/o mantenimiento de los equipamientos de playa, lo supone un total de 55 puntos”.
“Todo esto también corrobora que el pliego de condiciones de la parcela del Novo no se regía por los criterios legales que siempre se ha regido cualquier licitación de un equipamiento público, lo que incrementa las sospechas de que se trata de una cesión encubierta un tanto extraña”, ha comentado Antonio Pérez Noria, quien ha finalizado reiterando que, “en definitiva, lo que se demuestra con ambas licitaciones es que el Gobierno de Marín no actúa de igual forma en todos los procesos de licitación y, por tanto, no tiene unos criterios claros de actuación”.