El sueño de convertirse en estrellas de fútbol europeo truncada por la promesa de un falso ojeador es el argumento con el que la película 'Diamantes negros', del director Miguel Alcantud, que se ha presentado este lunes en el Festival de Málaga. Cine español, denuncia el tráfico humano y el "mercadeo" que hay dentro del deporte rey.
Alcantud narra el tráfico de niños con la historia de Amadou y Moussa, que serán captados en Mali por con ojeador y llegarán desde África con 15 años y la promesa de ser estrellas de fútbol. Separados de sus familias y traídos a Madrid para triunfar comenzarán un periplo por España, Portugal y el norte de Europa, que les enseña de primera mano las sombras de este deporte.
El director ha señalado que se trata de una una película "muy documentada" en el que no se ha buscado hacer una crónica periodística". "Hemos intentado entrar desde los sentimientos, familiarizarnos con estos chicos, con lo que les pasa y vivirlo con ellos".
Alcantud ha denunciado que "traen chicos de 15 años de África para ser futbolistas, si les sirve valen, porque todo el mundo busca el nuevo Kanouté o Drogba, pero si no los dejan en la calle, tirados y abandonados de cualquier manera. Ni siquiera les dejan volver a África por una cuestión cultural y económica", ha señalado.
Ha afirmado que la cinta "es un drama muy documentado" y "basado en hechos reales, ya que todo lo que está en la película le ha pasado a alguien que conoce. "Intentamos no hacer tremendismo, el caso medio es donde estamos nosotros, luego hay más o menos soluciones".
Los actores que aparecen en la cinta fueron seleccionados en un casting, aunque, según el director, casi ninguno se había puesto antes delante de una cámara. El actor Alassane Diakite ha comentado que ha vivido el 95 por ciento de la imagen que la película presenta. Ha explicado que le gustaba el fútbol y desde Mali veía siempre los partidos españoles, ya que "el sueño de los niños de África es venir a Europa a jugar", por lo que, primero, fue a Francia, al contar con más facilidad para poder entrar, donde conoció a un falso representante que "cada día me mentía".
Posteriormente, según ha continuado, como no había posibilidad de estar en un equipo grande tuvo que buscarse la vida y vino a España. Actualmente, juega al fútbol aunque ha reconocido que ha pasado "situaciones difíciles", aunque no "por el mal camino".
Por otro lado, ha explicado que el rodaje ha sido "muy duro, extenso y con muchas localizaciones", pero que "se ha realizado desde la verdad, implicándonos e insertándonos dentro del país". Además, ha afirmado que "es un guión que se ha visto con la propia gente de Mali para no hacer la visión del blanco que va allí".
TRÁFICO
El actor Guillermo Toledo ha indicado que cuando le pasaron el guión no conocía el problema y le interesó el proyecto, además de por no tener trabajo, por "lo que cuenta la película: es un privilegio participar aunque sea para hacer dos o tres secuencias cortas". También ha comentado que la película "intenta abrir los ojos a la gente y está dirigida a los aficionados al fútbol, para que sepan cómo funcionan los equipos a los que apoyan y el mercadeo que hay".
En este punto, ha reconocido que el "tráfico del inframundo" donde "se explota de una manera tan salvaje a miles de seres humanos es bastante desconocido". "Es un drama brutal sobre el que hay que abrir los ojos", ha apostillado.
"No está nada mal meterle mano a los equipos de fútbol", ha afirmado Toledo, al tiempo que ha hecho hincapié en que hay tres instituciones "intocables": "la iglesia, la monarquía y la Real Federación de Española de Fútbol, que pueden no pagar impuestos y pueden deber millones a las arcas del Estado".
CONTACTOS
Por otro lado, el director de la película ha comentado que intentó ponerse en contacto en la fase de documentación con dos de los club españoles más importante, el Real Madrid y el FC Barcelona, aunque sin éxito y al ver que "esa puerta se cerraba", supo que ir "oficialmente por los club de fútbol no iba a sacar ninguna información".
El único que ha colaborado ha sido el Atlético de Madrid, en fase de rodaje, que les cedió el estadio para realizar una secuencia. Por otro lado, ha explicado que tampoco ha podido hablar con ningún representante, aunque lo intentó.
El director de 'Diamantes negros' ha señalado, por último, que una película dramatizada con escenas de fútbol que están bien y puedan llegar a la gente "puede tener más visibilidad que cualquier documental bien distribuido", por eso, la idea "fue hacer una película de ficción para meter el dedo en la llaga y contar lo que pasa pero nunca desde el documental".
