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Ronda

Barriga y Martínez niegan las acusaciones por prevaricación tras la polémica por la concesión de un quiosco

La teniente de alcalde admite que su conversación con el denunciante fue "desafortunada", pero defiende la legalidad en todo el proceso de licitación

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La primera teniente de alcalde de Ronda, Isabel Barriga, y la concejal de Contratación en el Ayuntamiento, María del Carmen Martínez,  defendieron ayer su inocencia tras que un quiosquero de la ciudad, Eugenio Jurado, interpusiera contra ambas una demanda por prevaricación al considerar que procedieron de manera indebida en la concesión administrativa de un quiosco.

Según se relata en la denuncia, hecha pública por Efe, los hechos se produjeron hace más de un año, cuando este vecino rondeño mantuvo distintas conversaciones con Barriga para adquirir la adjudicación del quiosco que durante cincuenta años regentó una familiar suya. Este hombre no logró finalmente la licitación. Pero la demanda transcribe distintas grabaciones que el denunciante realizó con su móvil donde la teniente de alcalde manifiesta que el concurso “se puede amañar, y se ha amañado, pero no se ha amañado lo suficiente”. En otro de los momentos de las transcripciones se refleja como la edil reconoce que “tenemos el Ayuntamiento intervenido por la policía. Es que se están mirando todos los expedientes con lupa”.

En declaraciones a la citada agencia de noticias, Barriga admitió este viernes que se ha “equivocado en los términos empleados, pero no en los trámites de la adjudicación del quiosco, que se han hecho de forma legal. Se tuvieron en cuenta requisitos como el número de hijos y las circunstancias económicas".
Barriga, que llegó a admitir sus “desafortunadas” palabras, se defendió señalando el contexto en que se produjo la conversación con el denunciante: “Le contesté en los mismos términos que él me hablaba. Con amañar sólo me refería a que se habían tenido en cuenta las características familiares que presentaba”, defendió.


Barriga concluyó que se remite a los hechos para demostrar que el procedimiento ha sido legal, y admitió que incluso intentó por tres veces la adjudicación directa del quiosco al ahora denunciante en sendas Juntas de Gobierno, lo que no fue posible ante distintos informes técnicos, lo que llevó a la ahora denunciada licitación.

Por su parte, María del Carmen Martínez, la responsable de Contratación, tuvo que responder a preguntas de la prensa sobre esta cuestión en una rueda de prensa que había convocado este viernes el Partido Popular. La edil, que comenzó asegurando a los periodistas en la sede de su partido que “este no es el foro de discusión de ese asunto”, indicó que “aún no he recibido ninguna comunicación sobre una demanda que he conocido por la prensa. Cuando la reciba, la analizaremos”, dijo, al tiempo que asegurar estar “muy tranquila”, convencida de que “el procedimiento ha sido limpio”. Martínez, que eludió la pregunta en torno a si ha pensado en su dimisión, sí que dijo al fin que “todo ha sido desafortunado por parte de este señor”.

El quiosco objeto de la polémica no es sino el que el Ayuntamiento acabó desmantelando hace un par de semanas en la calle Cruz Verde, defendiendo el Consistorio que el ahora denunciante no abandonaba las instalaciones pese a haber sido adjudicadas a otra persona, hechos que motivaron una verdadera polémica entonces en plena calle.

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