Una agregada de la Embajada de Polonia en España ha identificado este lunes como Pietr Piskozub al joven de 23 años de nacionalidad polaca que falleció el miércoles a mediodía en el albergue municipal hispalense como consecuencia de una bronconeumonía, según el informe provisional del forense, y tras haber sido dado de alta esa misma madrugada en el Hospital Virgen del Rocío.
En este marco, fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) han indicado a Europa Press que este lunes ha sido identificado "plenamente" Pietr Piskozub, pese a que no portaba ningún documento de identidad en el momento de la muerte. Asimismo, se prevé que el viernes llegue a Sevilla un hermano del joven fallecido para reconocer el cadáver, momento en que el juzgado procederá al ofrecimiento de aciones, es decir, plantear a la familia la posibilidad de personarse en las diligencias previas abiertas o de interponer una denuncia si entendiera que "los hechos son denunciables".
De este modo, cabe recordar que el Juzgado de Instrucción número cinco de Sevilla ha recogido las diligencias correspondientes a la muerte de Pietr Piskozub, en las que figura un informe provisional de la autopsia elaborado por un médico forense tras examinar el cadáver del joven, un informe del que se permanece a la espera de que sea completado y que será trasladado a la Fiscalía.
El joven polaco Pietr Piskozub, de 23 años y que presentaba 30 kilos de peso, murió el día 2 de octubre a las 14,00 horas en el albergue municipal de Sevilla como consecuencia de una bronconeumonía, según las primeras investigaciones, después de que fuera dado de alta en el Hospital Virgen del Rocío a las 2,00 horas de ese miércoles, hasta donde llegó tras la alerta de unos vecinos sobre una persona que yacía en el suelo de la avenida la República Argentina.
Desde el Consistorio hispalense se advertía que el joven había sido remitido a los servicios sociales municipales desde el centro hospitalario, "donde había permanecido en el centro hospitalario desde las 00,30 a las 2,06 horas", apuntando a que sufría una "problemática social, pero sin detallar ningún tratamiento específico alimentario o con medicación", pese a que llegó al albergue "desnutrido y deshidratado".
Por su parte, desde la Consejería de Igualdad, Salud y Políticas Sociales se anunciaba una "investigación reservada" para aclarar las circunstancias que rodearon el caso, "esclarecer hasta el último detalle la actuación que se prestó y tomar las medidas disciplinarias y organizativas que correspondan", asegurando que la Junta de Andalucía está "colaborando estrechamente" con los juzgados.