El dueño de los dos locales ubicados en los términos jiennenses de Andújar y Úbeda donde supuestamente en el año 2011 se prostituían mujeres, sobre todo de nacionalidad paraguaya, identificado como J.F.H., ha declarado este lunes en sede judicial que "no le consta" que eso sucediera en dichos negocios, que ha rechazado definirlos como "clubes de alterne", calificándolos como "hostales y bares de copas".
Así lo ha manifestado J.F.H. en el transcurso de la declaración que ha prestado este lunes ante la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Jaén imputado por un supuesto delito de trata de seres humanos, en el marco de un juicio por el que otras cuatro personas, identificadas como R.S.R., G.M.M.H., A.E.M. y F.P.P., están acusadas del mismo supuesto penal.
Durante su declaración, este hombre ha reconocido que era el propietario de un local ubicado en la autovía A-4 y de otro en la carretera N-322a, así como que vivía en el primero de éstos --"un hostal con bar de copas"-- junto a su pareja, la también imputada R.S.R., a la que ha querido desvincular de este caso al insistir en que ella "no ha participado nunca en los negocios" suyos y cuenta con "ingresos propios", además de que "pasa largas temporadas en Cádiz, su tierra natal".
A preguntas de la Fiscalía, este encartado ha afirmado que en sus locales "se hospedaban también hombres", no sólo mujeres, y que en ellos podía alojarse "cualquier persona que solicitase una habitación", de modo que en el caso de que fueran de nacionalidad extranjera "sólo les requería el pasaporte".
Según el dueño de estos negocios, las mujeres paraguayas que supuestamente se prostituían en ellos eran clientas de esos establecimientos que se alojaban en los mismos "durante un tiempo, a veces más y otras menos", y lo que hacían allí era "dormir".
También ha indicado que estas mujeres contaban con unos "topes mensuales" de gastos, y, "si los sobrepasaban", recurrían a "pedir prestado dinero a cualquier conocido que tuvieran cerca". Además, ha asegurado que el dinero intervenido en el marco de una serie de registros realizados entre septiembre y diciembre del año 2011 por la Guardia Civil en esos locales --algo más de 7.500 euros-- procedía de "la recaudación" de ambos negocios.
Igualmente, este imputado ha indicado que en el año 2011, cuando se produjeron los referidos registros por parte de la Benemérita, él estaba de baja médica, así como que "delegaba" en otras personas las tareas de explotación diaria de los locales, y que a ellos "acuden mujeres sudamericanas, pero también rusas o españolas".
Por último, el Ministerio Fiscal le ha mostrado anotaciones contables con cantidades supuestamente pagadas y adeudadas por las mujeres de procedencia paraguaya, unos apuntes que el procesado no ha sabido precisar a qué correspondían por "no recordarlo", si bien ha indicado que podrían tratarse de "deudas por alojamientos sin pagar".
POSICIÓN DE LA FISCALÍA
El Ministerio Público pide para cada uno de los cinco acusados en este caso una pena de seis años de prisión por un supuesto delito de trata de seres humanos cometido presuntamente al dedicarse a traer mujeres a España, principalmente de nacionalidad paraguaya, para su prostitución en los referidos locales de Andújar y Úbeda.
El juicio por este caso se ha señalado después de que agentes de la Guardia Civil registrasen los referidos clubes de alterne entre septiembre y diciembre del año 2011, en unas actuaciones en las que, además de sorprender a las mujeres mientras se prostituían, intervinieron una pistola simulada y decenas de sobres que recogían dinero del recaudado en esos negocios, que sumaban en total más de 7.500 euros.
Tras las declaraciones de los acusados, el juicio se retomará este martes por la mañana con la lectura de las conclusiones de las distintas partes personadas en el caso, según han apuntado a Europa Press los abogados de la defensa de J.F.H. y R.S.R., tras lo cual está previsto que quede visto para sentencia.