Sin prisa pero sin pausa, la dirección deportiva cadista continúa peinando el mercado futbolístico en busca de las piezas que completen la plantilla que aspire, una temporada más, al ascenso a Segunda División A.
Por un lado, las salidas pendientes ya son públicas. Ayer se hizo oficial la rescisión del contrato que unía al club y al mediocentro Mikel Martins, cuyo destino apunta al Hércules. Además, también se buscan acuerdos para tal fin con el central Fran Pérez, que anoche no se vistió en Arcos, y el centrocampista Fall, que no entran en los planes de Antonio Calderón. Por otra parte, quedan pendientes de cerrar varias posiciones, siendo la defensa la línea que más efectivos necesita.
Antonio Calderón desea contar con un extremo izquierdo que bien podría ser de nuevo Migue García dado su buen nivel del pasado curso. La polivalencia de Fran Machado, habitual mediapunta en el Real Jaén, haría sitio a esa nueva incorporación cuando no esté disponible al cien por cien la pareja de ataque formada por Jona y Airam. En principio, parece que ambos compartirán titularidad siempre que sea posible. Falta mucho para el comienzo de la temporada, pero el 4-4-2 que se viene probando en los amistosos así parece decirlo, algo lógico vista la tremenda calidad de ambos.
En la zona de centrales llegará al menos un efectivo, ya que a día de hoy sólo se cuenta con Josete y Servando como fijos, a la espera de que algún canterano convenza al cuerpo técnico para quedarse en la primera plantilla. En ese papel podría entrar el joven Diego González, que tan buena impresión está dejando en los amistosos de pretemporada ya disputados. De hecho, anoche partió como titular junto a Servando, recién llegado del Real Jaén
En el lateral zurdo preocupa mucho el estado físico de Andrés Sánchez, un jugador que si está bien marca las diferencias, pero lleva demasiado tiempo sin encontrarse a tope de forma regular por los problemas que arrastra en un tobillo. Sin ir más lejos, anoche tampoco estuvo disponible para jugar en Arcos. Además, el canterano Tomás tiene ofertas para salir y buscar minutos lejos del Ramón de Carranza, pero de momento las mantiene aparcadas y sueña con hacerse con un hueco en el equipo titular tras dejar atrás una temporada de largas lesiones.