La concejal María del Carmen Martínez ha declarado este miércoles en calidad de imputada ante la jueza titular del Juzgado Número 2 de Primera Instancia e Instrucción de Ronda, en el procecimiento iniciado de oficio por la magistrada tras el accidente ocurrido en el cementerio en mayo pasado, cuando se rompió una escalera durante el entierro de una mujer, cayendo al suelo varias personas, entre ellos alguno de sus familiares, y rompiéndose incluso el ataúd donde reposaban sus restos. Tras el atestado levantado por la Policía Nacional aquel día, se inició un procedimiento penal en el que resultó imputada Martínez.
Según el abogado defensor de la familia, Francisco Montoro, la declaración de la edil "ha dolido a la familia tanto como la total situación de abandono que han sufrido desde aquella tarde en que se produjo el accidente". Montoro relató que dicha declaración se basó en "culpar a los empleados del cementerio", puesto que la concejal "mantiene una y otra vez que dio orden de no usar aquella escalera, pero sin ser capaz de responder a preguntas como si se podía utilizar el elevador mecánico ni siquiera si este tenía permiso de circulación porque para su uso en la zona alta del cementerio es necesario que salga de las instalaciones". Montoro defendió que "su única intención ha sido eximirse de cualquier responsabilidad asegurando que no sabe nada".
Además de Martínez, han declarado hasta tres testigos, personas que cayeron de aquella escalera, entre ellos uno de los empleados del cementerio. El abogado de la familia opina que el trabajador, "de forma muy curiosa, apartándose de responder a lo que Su Señoría le preguntaba, optó por seguir un camino: defender al Ayuntamiento". Así, la jueza habría incluso recriminado al empleado "en varias ocasiones" tal actitud, "llegando a recordarle que le había llamado como testigo afectado, como perjudicado, y no como imputado".
El abogado recordó que la familia optó por no denunciar al Consistorio al subrayar que la jueza haya actuado de oficio a la hora de iniciar el procedimiento penal, insistiendo en que "deseamos ahora, como antes, poder alcanzar un acuerdo amistoso con el Ayuntamiento". Explicó que el hijo de la fallecida, uno de los accidentados aquella tarde de mayo, "aún sigue en tratamiento psiquiátrico e incluso con numerosas afecciones físicas provocadas por dicha situación psicológica". La próxima semana será de nuevo visto por el médico forense, por tercera vez, de cara a que éste pueda emitir un informe que sirva a la magistrada para decidir las responsabilidades que procedan en el caso.
