Tal y como se puede leer en el documento que ilustra esta página, el pasado 24 de julio de 2014 el alcalde de San Roque, Juan Carlos Ruiz Boix, firmó un decreto por el que asignaba a un “empleado del sector público local” las funciones de “encargado, coordinador y supervisor del mantenimiento y adecuación de las instalaciones deportivas de carácter municipal cuya gestión estén encomendadas a un tercero a través de cualquiera de las modalidades de contratación administrativa”.
Según ha podido saber este diario, ese “empleado del sector público local” forma parte de la plantilla de la empresa municipal Emadesa (Empresa de Servicios, Medio Ambiente y Desarrollo Sostenido de San Roque S.A.).
Fuentes municipales han indicado que podría haber una irregularidad en esa asignación de funciones, ya que el personal de Emadesa no forma parte de la plantilla municipal. Es más, han precisado que la competencia sobre “los campos de fútbol y demás instalaciones deportivas municipales corresponden al Ayuntamiento, y Emadesa, por sus estatutos, no tiene competencia en ellos”.
De hecho, precisan, “tenemos personal laboral y funcionarios que son los que deben llevar esa supervisión, ya que el mantenimiento de las instalaciones deportivas está externalizado a través de diversas concesiones o conciertos”. Otras, por contra, como es el caso de los pabellones deportivos, los lleva directamente el Ayuntamiento.
De ahí que no se entienda que un empleado de Emadesa pueda estar llevando el control de las instalaciones municipales, insisten, “porque no está en sus estatutos”.
Las nóminas
Lo que sí han dejado claro a VIVA las citadas fuentes municipales es que, a pesar de que el trabajador en cuestión desempeña sus funciones en la Delegación Municipal de Deportes, sus nóminas no salen de las arcas del Ayuntamiento.
“Este empleado continúa cobrando de Emadesa”, afirmaron.
Resulta curioso también que, incluso antes de la firma del decreto, este trabajador desempeñara ya otras funciones diferentes a las que le correspondían como empleado de Emadesa. Es el caso de la redacción del Reglamento de Protocolo y Ceremonial del Ayuntamiento de San Roque. Fuentes municipales han indicado que fue él quien se encargó de este protocolo, que se llevó a pleno el pasado 26 de junio de 2014 para su aprobación inicial y fue aprobado con los votos a favor del equipo de Gobierno y PP, y la abstención de USR. Aunque han pasado ocho meses desde entonces, nunca se ha vuelto a llevar a otra sesión plenaria para su aprobación definitiva. Al parecer, entre otros motivos, porque hubo vecinos y asociaciones que presentaron alegaciones tras la exposición pública.