Si en el barómetro de febrero el desempleo había bajado una décima y se situaba como principal preocupación para el 75,2% de los encuestados, ahora el porcentaje ha subido un punto, con una cifra insólita hasta ahora en las encuestas del CIS.
Al mismo tiempo, en este muestreo, donde los problemas económicos figuran en segundo puesto (citados por el 52%), y el terrorismo en tercer lugar (con un 19,4%), los españoles mantienen su pesimismo sobre la situación económica porque el 75% la califica de “mala” o “muy mala”.
El muestreo, confeccionado a partir de 2.475 entrevistas entre el 4 y el 12 de marzo, revela que a la par que sube la inquietud ciudadana por el desempleo baja 2,4 puntos la referida a “los problemas de índole económica”.
Repite el terrorismo en el tercer puesto, aunque también con menor porcentaje, porque si en el pasado mes de febrero lo mencionaba el 20,6% ahora es el 19,4%, y lo mismo ocurre con la inmigración en el quinto lugar: en el barómetro anterior era citada por el 16,4% y ahora por el 14,4%.
Más abajo de la tabla cambia la posición estadística de la vivienda, que, con un porcentaje del 11,3, pasa al sexto puesto y cede el quinto a la inseguridad ciudadana, ahora una gran preocupación a juicio del 13,1% de los encuestados.
El último porcentaje computado para la delincuencia era del 11%, de manera que ha subido 2,1 puntos en un mes.
Cuando el CIS pregunta a los españoles por el problema que más les afecta personalmente, vencen las dificultades económicas (43,6%), seguidas del desempleo (37,6%) y la vivienda (11,4).
Percepción pesimista
En cuanto a la percepción sobre la situación de la economía española sigue siendo pesimista, aunque con ligeras mejorías en algún aspecto.
Sólo el 3,4% dice que es “buena” o “muy buena” (antes era el 3%), el 21,2 la califica de “regular” (el 21,7 en febrero) y el 75% opta por tacharla de “mala” o “muy mala”, dato peor que el del último muestreo (74,6%).
El 37,2% vaticina que empeorará dentro de un año (2,1 puntos menos que en febrero), el 36% afirma que seguirá igual (antes era el 32,6) y el 18,3% augura una mejoría en la situación económica, un punto más que en la encuesta anterior.
El CIS pregunta además sobre la situación política, que es “mala” o “muy mala” para el 47,7% (el 47,2 en febrero), “regular” a juicio del 37,1% (anteriormente el 34,9) y “buena” o “muy buena” sólo para el 8,3%, cifra que rebaja el 10,5% de ciudadanos que la consideraban así en el mes anterior.
De cara al futuro, un 10,6% dice que mejorará, el 55,4% apunta que seguirá igual y el 21,4% se inclina por un empeoramiento de la situación política dentro de un año.