Tras la disolución definitiva de las empresas municipales SODESA y SURSA, así como de las distintas Fundaciones municipales provenientes del periodo de Gobierno de PP y RRUU al frente del Ayuntamiento de Rota, y una vez que las delegaciones municipales correspondientes han asumido las funciones de las entidades disueltas, el equipo de Gobierno (PSOE e IU) se dispone a acometer una tarea compleja: la de la disolución de la empresa municipal Aremsa.
En principio la disolución de esta empresa municipal, por la cantidad de funciones y de encomiendas que asume, no estaba prevista, pero ante las dificultades que está encontrando el nuevo equipo de Gobierno para el nombramiento de un nuevo Consejero Delegado, la opción que se va a tomar es la de disolver la empresa. No poder nombrar un Consejero delegado impide el funcionamiento y gobierno de la sociedad, y el bipartito ha optado entonces por su disolución definitiva. Una tarea hercúlea teniendo en cuenta que Aremsa actualmente asume labores como la gestión de la limpieza viaria, transporte urbano, gestión del ciclo del agua, cuidado y mantenimiento de las instalaciones deportivas, parques y jardines, mantenimiento de pipicanes y lacero municipal, mantenimiento y cuidado del centro de interpretación de la mayetería y de la escuela municipal de hípica, gestión del parking subterráneo ‘La Merced’, las zona azules, el servicio de informática del Ayuntamiento, onserjería del Castillo de Luna, limpieza de algunos edificios públicos, etc.
La intención de bipartito es la de iniciar este mismo mes, a mucho tardar en febrero, el expediente de disolución de Aremsa, para iniciar un proceso que podría dilatarse varios meses. Los técnicos municipales se encuentran estudiando los pasos a seguir, barajando distintas opciones y preparando los informes preceptivos, al igual que ha sucedido en el caso de las otras empresas ya desaparecidas y fundaciones.
En este caso, también será el Ayuntamiento de Rota y sus delegaciones quien absorba algunas de las funciones de esta empresa municipal, aunque como ha explicado el primer teniente de alcalde, Daniel Manrique de Lara, habrá otras funciones que no podrá asumir el Consistorio. Para ello, se está estudiando la posibilidad de adoptar una nueva forma jurídica, la de ‘entidad pública empresarial’, que permitiría al Ayuntamiento funcionar de forma similar a la que ha permitido hasta ahora Aremsa, pero según destaca Manrique de Lara “no sería necesaria la figura de Consejero delegado, ya que funciona con otros órganos como un presidente, un vicepresidente y un consejo de administración, y permitiría un mayor control del proceso de contrataciones, al contrario de lo que ha sucedido hasta el momento con Aremsa”. Esta nueva sociedad estaría más tutelada por el Ayuntamiento, y no tendría tanta autonomía como tiene ahora Aremsa.
De momento esta opción es tan solo una posibilidad y se está estudiando, aunque como ventajas, Daniel Manrique explica que permitirá seguir adelante con el funcionamiento normal, y dará una mayor flexibilidad a determinados servicios, como la gestión del ciclo del agua por ejemplo. No obstante, el teniente de alcalde reconoce que Aremsa funcionaba correctamente, pero la situación actual hace inviable su continuidad. “La pervivencia de Aremsa y una gestión transparente eran perfectamente compatibles”, señala Manrique de Lara.
¿Qué pasa con la plantilla?
En cuanto a la plantilla de trabajadores de Aremsa, que actualmente estaría compuesta por 200 empleados, entre fijos y eventuales, Daniel Manrique explica que el proceso a seguir será el siguiente: habrá algunos de estos empleados que, por las funciones que desempeñan, puedan pasar a ser empleados del Ayuntamiento de forma subrogada, y otros que pasarían a ser empleados de la nueva entidad pública que vendría a sustituir Aremsa. No oculta el delegado que en el proceso se producirán algunos despidos debido a reajustes necesarios, y aclara además que los trabajadores que pasen de Aremsa al Consistorio o a la nueva entidad “tampoco entrarán como empleados fijos en el Ayuntamiento, ya que sus puestos habrá que regularizarlos, y por tanto esas plazas habrá que sacarlas a concurso oposición, ya que gran parte de ese personal entró a trabajar sin pasar por un proceso previo de selección”.
Lo que sí ha querido dejar claro el teniente de alcalde es que con independencia de la decisión que se adopte, los ciudadanos no van a notar nada en cuando al funcionamiento de servicios públicos, al igual que no se ha notado al suprimir el resto de empresas y fundaciones municipales en su proceso de absorción por parte del Ayuntamiento de Rota.
La intención final no es otra que la de adelgazar la estructura administrativa del Ayuntamiento, produciendo un ahorro para la administración y organizando bien los servicios que ahora presta Aremsa, redimensionando así la nueva entidad resultante. “Aremsa era y es un Ayuntamiento paralelo”, ha señalado Manrique.