La exalcaldesa de Jerez, Pilar Sánchez, pudo salir este miércoles por unas horas de la prisión de Alcalá de Guadaíra para despedirse de su madre, que falleció ese mismo día y cuyos restos fueron trasladados en la tarde de este jueves al cementerio.
Pilar Sánchez no pudo estar presente en las exequias que se celebraron en la parroquia de San Juan de Ávila ni en el posterior entierro, ya que debió regresar el mismo miércoles a la prisión para continuar cumpliendo su condena por el denominado caso PTA. Además, la exalcaldesa estuvo acompañada en todo momento por funcionarios policiales, ya que no dispone de ningún tipo de permiso penitenciario. De hecho, a este tipo de salidas de prisión se les da el mismo tratamiento que a aquellas en las que el reo debe acudir a algún tipo de consulta médica.
La exalcaldesa permanece en prisión desde febrero, de modo que afronta su primera Navidad recluida, dándose además la penosa circunstancia de coincidir estas fiestas con el fallecimiento de su madre. Sánchez ha pedido un régimen que permite a los internos trabajar de lunes a viernes fuera de la prisión y regresar solo a dormir, mientras que los fines de semana debe permanecer encarcelada.
