Los marbellies entraron totalmente fríos al partido, al igual que el tiempo que imperó durante todo el encuentro, con mucho frío y hasta con nieve. Una circunstancia que se torno en apatía, conforme transcurría el partido. Tras dos primeros errores defensivos, que les costó las dos primeras marcas, muy pocas cosa se pueden rescatar de un partido, donde muy pocos jugadores se pueden salvar de la debacle de actitud del equipo. En frente, si hubo un equipo. Que con los mismos problemas de bajas de jugadores (ambos equipos solo pudieron convocar 19 de los 23 jugadores posibles, a incluir en el acta), si tuvieron una mayor ambición y sobretodo, actitud defensiva. Con estas premisas, les bastó para llevarse de calle el partido y endosar un justo y severo correctivo a los visitantes.
Ahora, hay dos semanas hasta el próximo partido, que será en casa, ante uno de los favoritos del grupo, el Liceo Francés de Madrid. Dos semanas para aprovechar para trabajar y reconducir el bagaje negativo de las últimas jornadas. En las que se han perdido tres de los cuatro partidos, por demerito propio y que ha provocado, pasar de luchar por estar entre los cuatro primeros (el cuarto puesto estaba al alcance de la mano), a pasar por no luchar para no quedar entre los cuatro últimos. Ahora mismo, los marbellies son octavos con 43 puntos. Están a 10 puntos del cuarto y sacan 15 puntos al noveno. Pero, los cinco partidos que restan, le toca jugar con los cuatro primeros y que con la actual actitud y rendimiento en el campo, se antojo muy difícil, que se puedan sacar resultados positivos, que reconduzcan hacia el comienzo ilusionante de principios de temporada y del primer tercio de competición.
