Artículo “Yo soy FREE”
Cuando se utiliza la palabra inglesa FREE se evoca en nuestra mente la idea de que aquello a lo que se hace referencia es GRATIS. La gratuidad es un concepto bastante polisémico ya que puede ir asociado a la grandeza de la donación más desinteresada o a la bagatela que difícilmente puede ser intercambiada por algo que tenga valor, o incluso vendida por dinero. También se relaciona en el mundo comercial con la ausencia de determinadas sustancias en un determinado producto. Así se utiliza para libre de impurezas, libre de azúcar, sin calorías…
Por otro lado FREE se relaciona con una gran palabra del castellano LIBERTAD, que encierra profundos significados, ya que para un conjunto de personas la libertad es sinónimo de ausencias de impedimentos y para otro es la única cualidad que puede garantizar un encuentro verdadero entre seres humanos, siendo ésta condición indispensable pues sólo se alcanzaría la humanidad desde la libertad. Ningún comportamiento impuesto, ningún acto que anula la libertad, podría considerarse humano.
FREE relacionada con la LIBERTAD adquiere una dimensión que trasciende, tanto la ausencia de sustancias, como lo gratuito, para situarse en el eje de la esencia humana. Una humanidad que, además de asumir la gratuidad del inmenso regalo que es la vida, del disfrute de todo lo natural, actúa para preservar los valores heredados graciablemente sólo por el hecho de nacer, y además para que felizmente sean compartidos por todos los seres vivientes. Un impulso que transita por las letras de las primeras canciones de Brisa Fenoy y que da título a su nuevo tema: FREE. Una canción que en sus palabras anima a la "lucha para que no te impidan ser tu mism@, desarrollar tus visiones, afrontar tus misiones y retos. Y al mismo tiempo es una lucha interior por ser consecuente con aquello que éticamente consideras un bien, para situarte por encima de tus miedos, de tus fantasmas, de tus adicciones. La Libertad se conquista".
Un concepto que nace en la superación de las propias limitaciones para alcanzar la capacidad, la actitud y aptitud necesarias que permiten la cooperación con los iguales en una obra permanente de construcción de una sociedad justa. Nacemos dependientes, no libres realmente. Necesitamos a nuestros progenitores para sobrevivir y aquello que aprendemos no siempre nos ayuda a ser menos dependientes. Asumimos ideas, costumbres, tradiciones que condicionan nuestros comportamientos casi automáticamente. Situarnos conscientemente ante nuestras circunstancias ayuda a posicionarse sobre lo que hay que estimular y lo que se debe descartar del diario vivir para que progresivamente ser cada quien más libre, menos egoísta, mas persona humana. Cuando se va llegando a ese estado, toma mayor importancia aún la libertad de quienes te rodean, como condición de tu propia libertad.
Fdo Rafael Fenoy Rico