El próximo 16 de septiembre comienza el curso escolar para los alumnos que ingresan en el instituto. Los alumnos del CEIP Mario Vargas Llosa de Marbella tendrán que ir a aulas prefabricadas, unas aulas que todavía no están instaladas.
Este es el motivo de indignación que ha llevado a más de medio centenar de padres y madres de este centro educativo a concentrarse el pasado miércoles en el terreno donde cerca de un centenar de niños y niñas deberán estudiar, al menos, los dos próximos cursos.
Así, han pedido la Junta de Andalucía y al Ayuntamiento que “se comprometan y sean eficaces, eficientes y transparentes” para que la instalación de unas aulas prefabricadas para estudiantes de Secundaria que están a la espera de la construcción de un instituto “sea una realidad cuanto antes y con todas las garantías de una enseñanza de calidad”.
“Queremos trasladar a los equipos de gobierno local y autonómico nuestra más profunda indignación ante la pasividad, ineptitud y falta de transparencia e información entre las propias administraciones y hacia los padres”, señaló el presidente del AMPA del colegio, Jorge Gil.
Según el presidente del AMPA, los padres de los alumnos “sufren una situación muy injusta” ya que, ha recordado, los estudiantes tuvieron que recibir clases en aulas prefabricadas en su etapa infantil.
Por su parte, la delegada de Educación de la Junta en Málaga, Mercedes García Paine, aseguró que el AMPA “estaba informada de que este miércoles comenzaban las obras y de que las aulas prefabricadas estarán para que el curso comience en tiempo y forma”.
Por último, directora general del Ayuntamiento de Marbella, Carmen Díaz, ha señalado que una empresa acondicionará la parcela en la que se ubicarán las aulas prefabricadas y otra instalará los módulos. “Desde Planificación nos dicen que estará todo terminado para el inicio del curso y aquí estaremos pendientes de que así sea”, explicó.
