Una asociación entre la NASA y Qatar Foundation rebuscará la cada vez más escasa agua enterrada en los desiertos del Sáhara y la Península Arábiga, con tecnología radar que ya se usa en Marte.
Muchos acuíferos en esas regiones se están agotando rápidamente para satisfacer las necesidades de las comunidades locales.
El proyecto OASIS (Orbiting Arid Subsurfaces and Ice Sheet Sounder) busca poner un satélite en órbita terrestre para mapear la distribución de los acuíferos poco profundos debajo de la superficie del desierto.
Los científicos planean usar el instrumento de radar del satélite para estudiar cómo se originaron esos acuíferos y cómo se mueve el agua subterránea debajo de los desiertos a través de un complejo sistema de fracturas del subsuelo que se extienden como una telaraña entre los acuíferos. Los datos recopilados en el proceso ayudarían con la gestión de los acuíferos.
"La comunidad científica está entusiasmada con esta misión. OASIS sería el primer radar espacial diseñado específicamente para detectar directamente agua subterránea en la Tierra", dijo en un comunicado James Graf, director de Ciencias y Tecnología de la Tierra en el Jet Propulsion Laboratory.