Los rebeldes hutíes del Yemen aseguraron este jueves haber alcanzado con un misil objetivos de la petrolera estatal saudí Aramco en Yeda, en el oeste de Arabia Saudí, información que no ha sido confirmada por Riad, que sí dijo haber interceptado otros dos misiles lanzados contra otras ciudades.
"Nuestra fuerza de misiles disparó contra la saudí Aramco en Yeda en la madrugada de hoy un misil Quds 2 y el impacto fue precisó", anunció el portavoz militar del movimiento insurgente chií, Yehia Sarea, en un mensaje en su cuenta de Twitter.
Desde Arabia Saudí no se ha informado de ningún ataque contra Yeda ni contra instalaciones de la petrolera, aunque el portavoz de la coalición internacional de países árabes que combate en Yemen a los hutíes, Turki al Malki, afirmó que habían interceptado un dron dirigido contra una ciudad del sur del país.
"Las fuerzas de la coalición lograron, gracias a dios, interceptar y destruir la madrugada del jueves un dron cargado con explosivos. La milicia terrorista hutí, apoyada por Irán, lo lanzó en una acción sistemática y deliberada para atacar a civiles y objetivos civiles de la ciudad de Jamis Mushait", dijo Al Malki, según la agencia de noticias oficial saudí SPA.
Y la televisión estatal Al Ejbariya informó de la interceptación de otro misil dirigido contra la ciudad de Jizán (suroeste).
Estos ataques se producen en un momento en el que los hutíes han intensificado el lanzamiento de drones y misiles contra Arabia Saudí desde que el Gobierno de Estados Unidos decidiera, el pasado 4 de febrero, retirar su apoyo a las acciones ofensivas de la coalición árabe en Yemen.
Estos proyectiles suelen ser interceptados por Arabia Saudí y, cuando caen, no suelen causar desperfectos ni víctimas, aunque el pasado lunes uno dejó cinco heridos en Jizán, a unos 50 kilómetros de la frontera con Yemen.
Las instalaciones de Aramco en Yeda, ciudad situada en la costa del Mar Rojo, son objetivo habituales del movimiento hutí. En noviembre pasado alcanzaron un tanque de crudo en una estación de distribución sin ocasionar daños de importancia.
Y en septiembre de 2019, otro ataque reivindicado por el grupo yemení causó la suspensión del 50 % de Aramco, la mayor petrolera del mundo, aunque Riad atribuyó la agresión a Irán.