La Audiencia Provincial de Almería ha condenado a cinco años de prisión a P.A.G.C., de 32 años, por un delito de lesiones después de que arrancara de un mordisco parte de la nariz a un hombre que, en el transcurso de una feria que se celebraba en la localidad almeriense de Huércal-Overa, tratara de mediar en una pelea entre el acusado y el cuñado del mismo, entre otras personas.
El fallo, al que ha tenido acceso Europa Press, impone al penado la prohibición de acercarse a su víctima a menos de 300 metros por un periodo de 12 años así como de comunicarse con ella de cualquier forma, de manera que, además, deberá abonarle 58.347,07 euros por las lesiones sufridas y las secuelas que le han quedado después de que le desgarrara los cartílagos nasales, así como por los desplazamientos a Granada para ser atendido en centros hospitalarios.
El tribunal ha considerado probado que el acusado, que cuenta con antencedentes penales y que se encontraba en prisión provisional por estos hechos, participó en una discusión en el interior del recinto ferial de la pedanía huercalense de Las Norias en el que había otras personas, entre ellas la víctima, en la madrugada del 23 de agosto de 2015.
Así, en un momento dado, el perjudicado trató de mediar en la pelea, si bien el acusado "agarró a este del cuello con el brazo" y una vez que lo tenía "inmovilizado", le propinó un "fuerte mordisco en la nariz" de tal forma que "le arrancó completamente los cartílagos nasales".
La víctima, que tenía 32 años en ese momento, necesitó dos intervenciones quirúrgicas con estancia hospitalaria para la reconstrucción de la punta nasal con injerto autólogo practicado con colgajo de piel de la zona central de la frente, con lo que tardó en sanar 156 días, de los que 40 fueron impeditivos y de los que 17 fueron de ingreso hospitalario.
El tribunal de la Sección Segunda de la Audiencia Provincial rechaza las atenuantes solicitadas por la defensa, que alegó que el acusado tenía afectadas sus capacidades cognitivas y volitivas por consumo de alcohol y estupefacientes al considerar que tales circunstancias no quedaron probadas.
Por otra parte, tiene en cuenta la agravante de reincidencia dados los antencedentes de P.A.G.C., quien reconoció su participación en lo ocurrido en sala, donde se pudo ver una grabación sobre de los hechos en los que el perjudicado también perdió parte del tabique nasal.
Junto a esto, el magistrado fija de cara a la ejecución de la sentencia diversas cantidades que deberán tenerse en cuenta adicionalmente puesto que el perjudicado aún tiene que someterse a nuevas operaciones en la nariz. Así, estima la petición al respecto realizada por la acusación particular que, al igual que la Fiscalía, interesaba seis años de prisión para el acusado. Contra la sentencia cabe recurso de casación ante el Tribunal Supremo.
