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Sevilla

Los guías turísticos critican el intrusismo de los "free tours"

La Asociación Unitaria de Intérpretes de Turismo de Sevilla (Auits) ha criticado los continuos casos de intrusismo que sufre el sector de los guías turísticos

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  • Turistas hacen cola para visitar el Álcazar de Sevilla. -

La Asociación Unitaria de Intérpretes de Turismo de Sevilla (Auits) ha criticado los continuos casos de intrusismo laboral que sufre el sector de los guías turísticos por la presencia a diario en la ciudad de los denominados 'free tours', "personas que a veces no están ni siquiera habilitadas para esa función, que no cobran por ello y que suponen una competencia desleal total" hacia quienes sí cuentan con titulación universitaria y tienen acreditados dos idiomas extranjeros.

El colectivo, que agrupa a unos 80 autónomos --todos ellos en posesión del correspondiente carnet para desarrollar ese trabajo--, lamenta que los 'free tours' sigan ejerciendo una actividad sin cumplir los requisitos exigidos para tal fin, por lo que instan a las administraciones públicas a que "tomen cartas en el asunto" e impidan esa práctica, tal como afirma a Europa Press la presidenta de Auits, Clotilde Palomino.

En este sentido, desde la citada asociación lanzan duras críticas por el hecho de que sus competidores "no declaren las cantidades percibidas" que reciben de los turistas a modo de gratificación. "Vemos a menudo que pueden llegar a sacar hasta 200 euros de un grupo. ¿Eso quién lo controla? Nosotros, en cambio, declaramos nuestros ingresos y pagamos cada mes la cuota de autónomo".


"Los 'free tours' cada vez tienen más guías habilitados aunque sigue siendo ilícito que el profesional que sí lo está trabaje por propinas y no declare impuestos". Al respecto, "también es importante mencionar que ya ha habido multas y sanciones a los guías y a las empresas, con cantidades que rondan los 2.000 y 3.000 euros", añade.

Ante esta situación, los guías asociados a esta entidad reclaman la creación de un colegio profesional, "como tiene Baleares", para paliar esa anomalía en el sector. Además, insisten en que el consentimiento de esas prácticas, que se anuncian como gratuitas en muchos portales de Internet, "va en detrimento de la imagen que proyecta la ciudad", sin olvidar "la contaminación acústica y visual que ocasionan con megáfonos y paraguas".

"El visitante, nacional o extranjero, debe saber que un 'free tour' no suele contarte nada relevante. Realizan un teatrillo en el que se repiten mucho, cuentan a menudo barbaridades y se inventan historias, con lo que la imagen que se lleva el turista es tremenda", añade la presidenta de Auits, quien lamenta que no están en condiciones de igualdad respecto a los 'free tours'.

En su opinión, "no podemos luchar con el marketing que se mueve detrás de esa figura, que se publicita en páginas web que se ven en todo el mundo y que destinan miles de euros para tener un posicionamiento muy potente". De este modo, cuando alguien busca contratar este servicio en Internet, "lo primero que le aparece en pantalla son estas multinacionales que ofrecen a 'free tours', y está claro que el visitante de a pie no va a exigir la titulación al guía".

En ocasiones, se trata de historiadores a los que les "apasiona" el turismo y que se dedican a mostrar la ciudad sin tener los niveles de idiomas requeridos --B2 y C1-- y ocasionando un perjuicio importante a nuestro colectivo. Por esta razón, la asociación de guías esgrime el Decreto autonómico 187/2020, por el que se modifica el Decreto 8/2015, de 20 de enero, regulador de guías de turismo de Andalucía.

En dicho texto se contempla que la intervención reguladora viene justificada por la necesidad de establecer unos "requisitos mínimos que garanticen la seguridad de las personas usuarias" y una cualificación profesional "acorde con las exigencias de la ciudadanía, que reclama un
servicio de calidad en la divulgación y protección del patrimonio histórico".

Las relaciones con Ayuntamiento y Junta de Andalucía son fluidas, reconoce Palomino. No en vano, con el Consistorio "vamos de la mano". "Colaboramos en todo lo que podemos, ya sea porque veamos una persona desorientada, observemos fallos eléctricos en monumentos, con el consiguiente riesgo de caídas de personas, o apreciemos que la suciedad se acumule en exceso en algún punto de la vía pública, por citar algunos ejemplos". También la Junta, a través del Registro de Turismo de Andalucía, "nos ayuda a la hora de conocer si una persona está o no habilitada para cumplir la función de guía".

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