El pasado mes de febrero de 2014, la Guardia Civil de Huelva, iniciaba la Operación KALUFO, investigando una organización criminal dedicada a la introducción de bellotas de hachís desde Marruecos a la ciudad de Ceuta.
Según ha indicado el Instituto Armado en una nota, la investigación se inició después de que fueran detectados numerosos transportes de Hachís, valiéndose de personas que introducían la droga en el interior del cuerpo humano.
Iniciadas las primeras indagaciones, éstas condujeron a los guardias civiles a Ceuta, donde la organización contaba con varias casas en las que se almacenaba la droga hasta que las denominadas “mulas” acudían para ingerirlas, por ser éste el sistema de transporte de la misma, cuyo destino final era Cartaya. Una vez en esta localidad, se procedía a su venta. En este sentido, hay que destacar que la mayor parte de las mismas eran distribuidas por la organización en Portugal.
Concluidas las investigaciones necesarias, el Equipo de Delincuencia Organizada y Antidrogas (EDOA) de la Comandancia de Huelva comenzó la denominada fase de explotación el día 25 de junio de 2014, efectuando tres registros domiciliarios en Cartaya, un locutorio en Lepe y siete registros domiciliarios en Ceuta.
Como resultado de la operación, se ha procedido a la detención de 20 personas, entre ellas 4 mujeres, dos de las cuales en avanzado estado de gestación. Los detenidos son 8 españoles, 8 marroquíes, 3 portugueses, y una ciudadana polaca. Del mismo modo se han aprehendido 2.202 bellotas de hachís, 5 vehículos, 13.395 euros, una pistola de fuego municionada del calibre 9 mm Parabelum, una escopeta de aire comprimido, una máquina envasadora al vacío y diversos efectos electrónicos y documentación de contabilidad.
Se ha desarticulado una organización muy activa que llevaba operando en las localidades mencionadas desde hace algunos años, creando una gran alarma social entre los vecinos. Hay que reseñar la alta experiencia conseguida por los miembros de la organización durante este tiempo, lo que les ha hecho adoptar importantes medidas de seguridad, que obligaron a los agentes a potenciar las labores de investigación mencionadas, prolongadas durante cinco meses.
Entre las labores policiales hay que destacar las que llevaron a los guardias civiles de esta unidad de investigación de la Comandancia de Huelva a trasladarse en numerosas ocasiones a la ciudad autónoma, para realizar labores de seguimiento y vigilancia.
La organización ha quedado completamente desarticulada desde sus bases hasta los dirigentes de la misma tanto en Ceuta como en Huelva. Es de destacar que ha sido la mayor operación dirigida desde la provincia de Huelva por su número de detenciones.
Los detenidos han sido puestos a disposición de la autoridad judicial conocedora del caso, correspondiendo la instrucción al Juzgado nº 1 de Ayamonte.