Mucho se puede decir sobre cómo nació el paso de palio en Sevilla, cuáles fueron las primeras reminiscencias que llevaron a las vírgenes dolorosas de nuestra tierra a procesionar al y como lo conocemos hoy día.
Rafa Ríos comenta que el uso del paso de palio para procesionar, al principio "no contó con el beneplácito de la Iglesia. Hay grandes dominicos que eran completamente contrarios al uso de este"
Sobre esto, el historiador asume que "el cronista El Abad Gordillo se hace eco del estreno de los pasos de palio y afea que se usen solo para las dolorosas, hay constancia de que el Cristo Yacente ha salido bajo palio sostenido o el ejemplo del Nazareno del Silencio y es una costumbre que se ha mantenido en otras zonas del Reino de Sevilla"
"Hay mucha disputa sobre cuál fue la primera dolorosa bajo palio; hay quien dice que es la Soledad de San Lorenzo, el Rosario de Montesión, la Virgen de Concepción... ahí el libro de Álvaro Dávila es una maravillosa guía de consulta", en el cual se asume que a lo largo del tiempo "cada hermandad va encargando algunos estrenos que van configurando un paso de palio, pero no es una regla cerrada, no son 12 varales, no hay candelería y en algunos casos eran andas muy pequeñitas que se completan con el ajuar de la Parroquia o la iglesia de turno"
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