La Ejecutiva local del Partido Socialista ha felicitado al comité de campaña, así como a todos sus militantes y simpatizantes en Sanlúcar, por el trabajo desarrollado durante la campaña, ya que desde el primer día y hasta la jornada electoral, "han desempeñado una magnífica labor, ratificada por los resultados finales". La prueba del compromiso político con su formación, y de la firmeza en la defensa de las políticas sociales es el hecho de que el PSOE volviera a ser el partido de Sanlúcar que más interventores tuvo en las mesas. “En estos momentos de complejidad social y económica es cuando más precisa es la implicación de los militantes, y en Sanlúcar han respondido de manera ejemplar defendiendo las ideas progresistas, encontrando el respaldo de la ciudadanía”.

Los resultados electorales de este domingo ratifican que Sanlúcar es una ciudad socialista, puesto que las restantes poblaciones de la provincia con más de 50.000 habitantes han registrado triunfos del PP, con una media de un 20% de diferencia; en Sanlúcar, por el contrario, el PSOE superó al PP por un punto porcentual, clara muestra, cotejando los datos entre poblaciones, de que el trabajo de Irene García y su equipo de gobierno han servido de ejemplo de políticas sociales, de cercanía al ciudadano y de ahorro económico.

El Partido Socialista de Sanlúcar considera que el esfuerzo realizado por los militantes y simpatizantes durante la campaña, explicando que un gobierno del Partido Popular significará un fuerte recorte de los derechos sociales, en políticas sociales tan importantes como la ley de dependencia, subsidio de desempleo, sanidad o educación, ha dado sus resultados, y es por ello que se ha producido una diferencia muy grande con otros municipios de la provincia: mientras que en todos ellos ha ganado el PP, en Sanlúcar el Partido Socialista obtiene más sufragios que el resto de formaciones.

El triunfo de los socialistas en Sanlúcar alcanza un mayor relevancia teniendo en cuenta que la crisis ha perjudicado en gran medida en ámbito nacional al PSOE, como ya había sucedido en la mayor parte de países de la Unión Europea en los que se han desarrollado comicios generales durante este etapa, donde siempre ha habido un fuerte castigo al gobierno, independientemente del color que sea.