Como todo casco urbano de una ciudad, nuestros gobernantes se decantan hacia una peatonalización o semipeatonalización del mismo, cosa que aplaudo ya que al estar lleno de historia y normalmente poseer un pequeño acerado, hacen que estas obras mejoren el tránsito por las mismas.
Para ningún portuense es desconocido el tema de los famosos parkings para la Real Plaza de Toros y para la entrada de la ciudad. Una persona que conozco, siempre me dice lo mismo, en tiempos de crisis aunque haya poco dinero hay que invertir y mejorar en las instalaciones, para poder competir al mismo precio pero con mejores características, porque con el paso del tiempo son los que ganarán la batalla a la misma.
Hay que reconocer que aunque los aparcamientos estén asfaltados y estén mucho más decentes que antiguamente, no son nada agradables a la vista y menos cuando existe “un gorrilla” dando vueltas cerca.
La ciudad necesita invertir en si misma, para que cuando acabe la crisis cuente con instalaciones modernas y acordes para acoger tanto a coches, como actividades y personas. La entrada a la ciudad necesita un gran parking que absorba el flujo de vehículos incesante que tenemos en verano, que cuando pienses en El Puerto no se te venga la idea de que cuesta trabajo aparcar, todo lo contrario, “llegamos, aparcamos rápido y nos vamos a disfrutar del centro”.
No puede ser un handicap el ser deficitaria en aparcamientos subterráneos, ya que aparte de su utilidad hacen que la ciudad sea más moderna, más turística y sobre todo más cómoda. Con la construcción de los mismos se ganaría unas perfectas zonas de ocio para arbolarlas y llenarlas de todo tipo de equipamiento público para el disfrute del ciudadano.
Se alargaría el trazado del Parque Calderón, se mejoraría la vista de la entrada al municipio y se ganaría una gran zona de descanso entre las plazas de España y de la Noria. Desde aquí, solicitar al Ayuntamiento de la ciudad que siga mejorando la misma y busque la fórmula para transformar más zonas de aparcamiento en línea en aparcamientos en batería.
Para paliar la zona de aparcamientos de la Plaza de Toros deberían pensar muy seriamente en poner toda la calle Valdés -desde Elías Ahuja hasta el Hospital- en batería, el acerado de una de las dos zonas de aparcamiento es enorme y en batería se ganaría mucho para los vecinos de esa zona y sobre todo para el eje comercial de la avenida del Ejército.