Los tres alpinistas, Jordi Corominas, Jonatan Larrañaga y Fabrizio Zangrilli, trabajan contrarreloj por el anuncio de cambios meteorológicos en su labor de aproximación para el rescate del montañero Óscar Pérez aislado en el Latok II (7.108 metros) desde hace varios días.

El esfuerzo de los montañeros se centró ayer en intentar acceder al collado, a unos 5.600 metros, pero las condiciones de una pared técnica está “resultando complicado y laborioso”, según los responsables del club oscense, porque “además de escalar deben fijar cuerdas para asegurar el descenso con Óscar Pérez”.

Jordi Corominas y Jonatan Larrañaga, a los que la falta de aclimatación limita su labor, comenzaron a bajar antes que Fabrizio Zangrilli, quien junto a varios porteadores de altura siguió trabajando unas horas más. Además ha surgido el contratiempo, según informan desde el campo base, de que las cargas lanzadas hace dos días por el helicóptero, con equipo de los porteadores y gran parte de la comida se había “desparramado y mojado”.

Por otro lado se va a suministrar al equipo de rescate con el helicóptero 2.145 metros de cuerda, mientras Simón Elías va a bajar a Skardú para ayudar a Sebastián Álvaro, ex director del programa Al filo de lo imposible, en la coordinación y gestión del rescate.

Además de mantener contacto con responsables de diversas instituciones aragonesas, en Club Peña Guara (al que pertenece Óscar Pérez) el contacto telefónico “es diario con el embajador de España en Paquistán, con quien intercambiamos información”, señaló ayer un miembro del club.