Así lo explicó a Europa Press el propio González, quien aseguró que no se bajará "hasta que cobre esta deuda", por la que, según indicó, ha tenido que cerrar su empresa y dejar a "14 ó 15 trabajadores en el paro".
Antonio González decidió esta mañana subirse a la grúa después de interponer varias denuncias para que esta empresa abone esta deuda, pero lamentó que "no hay forma de cobrar", a lo que añadió que "aguantar a 40 metros de altura sin comer ni beber hasta que recupere el dinero es la única solución".
La constructora granadina Garasa-Esñeco solicitó a finales de septiembre en el Juzgado de lo Mercantil de Granada un concurso voluntario de acreedores, junto con una propuesta anticipada de convenio ante la imposibilidad de formalizar la refinanciación bancaria que ha estado negociando desde el pasado marzo de este año para eludir su actual situación de insolvencia.