Las fuertes e incesantes lluvias del jueves y el viernes volvieron a poner en alerta a la comarca de Antequera. Los primeros cortes de carretera tuvieron lugar en la mañana del viernes en la localidad del Valle de Abdalajis donde el corte de la vía que los conecta con Antequera hizo que los 2.000 vecinos del municipio se quedaran incomunicados durante más de seis horas. Pasadas las dos de la tarde abrían de nuevo la carretera.
Las precipitaciones en esta localidad superaron los 60 litros por metro cuadrado algo que se dejó sentir de nuevo en el pueblo con la inundación de varias casas en la calle del Viento y en la calle Peligro. Allí, casi una docena de vecinos comenzaron a achicar agua desde primera hora del día. Isabel y sus vecinos denunciaron que ya era la segunda vez que ocurría. "Hay que arreglar la zona de arriba porque las casas dan al monte y todo el agua se viene para las viviendas", detallaron.
Lo peor se lo llevó la casa Pepa Caballero que un poco antes de las nueve de la mañana, tras escuchar un ruido muy fuerte, salió del baño y parte del muro de la parcela de al lado había caído sobre su cocina llevándose por delante todos los electrodomésticos. "Porque he ido a ducharme un poco antes de empezar la faena en la cocina sino me pilla allí", explicó.
Las lluvias también provocaron problemas en otras localidades como Archidona donde se mantuvo cortado el vial A-7282, que lo conecta con Antequera y los accesos a las localidades de Villanueva de Tapia y Algaidas. Según el alcalde, Manuel Sánchez, también había afectados varios caminos rurales, así como dos viviendas en la zona de Las Huertas y junto a la cooperativa La Purísima.
En Antequera el plan local de emergencia se activó pasadas las once de la mañana del viernes y finalizó sobre las seis de la tarde. Las lluvias afectaron de nuevo a Bobadilla en la plaza del Conde y calle San Luis con inundaciones por el desbordamiento del río.
También tuvieron que ser cortadas las carreteras del Alcázar en Matagrande por el desbordamiento del arroyo, la A-92 a la altura de Mollina, en el partido alto de la Vega, en la barriada Ortiz Recio de Bobadilla Estación, en la calle Niña de Antequera y en la carretera hasta el Nacimiento de la Villa.
Más incidencias
Aunque no con la virulencia del pasado 28 de septiembre, el río volvió a crecer en Villanueva del Rosario. Esta vez se desbordó en varias zonas llegando a contar de nuevo con hasta 50 metros de ancho, afectando a varios puentes y a la carretera de acceso al pueblo. Eso sí, como apuntó su alcalde, José Antonio González, la situación fue "bastante menos grave" y aunque el agua volvió a entrar en alguna de las viviendas junto al río, "no ha sido como la pasada riada de septiembre".
Por su parte, los vecinos de la localidad de Villlanueva del Trabuco respiraron tranquilos a media mañana cuando las lluvias aminoraron y el río, a punto de desbordarse, comenzó a bajar.