Conil CF 0
Arcos CF 0
Conil: Gallego, Mario, David León, Pablo, Corti, Expósito, Zequi (Adri Domínguez, 83’), José Manuel Narváez (Cornejo, 77’), Javi Navarro (Cristian Orihuela, 68’), Mejías y Cuenca.
Arcos: Isi; Javi Rodríguez, Nico, Molina, Chato; Alberto Durán, Maqui; Caballero, Álvaro Macías (José Antonio, 74’), Adri Romero (Álvaro Ramírez, 84’); y Álvaro González (Borja, 58’) .
Árbitro: José Luis Gamero Castro (Sevilla). Por el Conil CF amonestó a José Manuel Narváez, Javi Navarro y Adri Domínguez; y por el Arcos CF a Chato, Alberto Durán, Adri Romero y Borja.
Incidencias: Partido de la trigésima tercera jornada de Tercera División. Estadio Antonio Pérez Ureba. Unos 350 espectadores.
El Arcos logró arañar un valioso y trabajado empate en el Pérez Ureba de Conil ante un rival de los de “su liga”, de esos con los que se peleará los cuartos de aquí hasta el final de la temporada en una última parte del campeonato que se avecina como no apta para corazones delicados ya que la distancia entre el equipo que marca la zona de descenso, el Coria (18º), y el Écija (13º), es de solo cinco puntos cuando aún quedan por disputarse 27, de ahí que el próximo compromiso de los de Bermúdez en casa frente a uno de los conjuntos que integran la zona de descenso de categoría, el At. Espeleño, se presume como uno de los choques más decisivos de lo que queda de competición para los blancos, una verdadera final. Los antecedentes de las últimas jornadas no son demasiado halagüeños para el Arcos, que no fue capaz de derrotar a los dos equipos que visitaron el Barbadillo recientemente y que estaban por detrás suyo en la tabla, Guadalcacín y Coria, pero cada partido es una historia distinta.
Del choque en el Pérez Ureba no hay mucho que escribir. Fue un partido entre dos equipos mucho más pendientes de no cometer errores irreparables que le hicieran perder todos los puntos en juego que de buscar con ahínco el portal contrario, y el mal menor, el empate, no disgustó a ninguno de los dos: al Conil porque estrenaba técnico en el banquillo, el exarcense Alfonso Cortijo, y una derrota ante su público habría sido una pésima carta de presentación y un nefasto augurio, y al Arcos porque no puntuaba fuera desde las tablas de Algeciras, lo que unido a su victoria de la jornada anterior ante el Betis Deportivo, le valía para continuar sumando y mantenerse fuera, que no lejos, de la zona de pérdida de categoría, algo importante en lo psicológico ante lo que está por llegar y para seguir trabajando sin ansiedad.
Los conileños, con tres centrales y con Narváez y Fran Mejías -otro exarcense- en tareas de distribución y creación de juego, salieron decididos a encerrar en el área a un Arcos que no sabía cómo sacar el balón de su propio campo y que se las vio y deseó en el primer cuarto de hora ante el acoso de los amarillos, que insistían por las bandas con mucha voluntad y poco acierto en los envíos tanto de Zequi -¿les suena?- como de Javi Navarro. El Arcos ganó metros con algunas faltas -Nico y Adri Romero-, gozando Maqui de una ocasión de gol, pero su volea se marchó desviada.
La segunda mitad tuvo en Nico y, sobre todo, en el meta Isi Jareño a los dos grandes baluartes de un Arcos que desbarató con firmeza e inspiración las claras ocasiones de Álex Expósito y Cornejo, y que tuvo su opción de ganar en la diestra de Caballero a poco de terminar la contienda, escasa dinamita como para repetir la victoria de la jornada anterior frente al Betis, pero quién se acuerda ya de eso. Ahora toca vencer al At. Espeleño.
“Hemos estado muy metidos” (Zona mixta, Pepe Bermúdez, entrenador del Arcos C.F.)
“Iba a ser un partido muy feo y lo habíamos trabajado durante la semana. Está claro que ahora lo que hay que hacer es sumar en campos como el del Conil, que es muy complicado por sus dimensiones. Si te equivocas, lo puedes pagar caro y creo que los dos equipos hemos intentado no equivocarnos y jugar directo, coger segundas jugadas y algún que otro balón parado: dos acciones de Isi en un saque de banda y un córner y, la nuestra, en una jugada de Caballero que no empala bien en un pase atrás. Era lo que preveíamos, un partido muy competid con muchos duelos individuales, muchas batallas y segundas jugadas. Para mí, mi equipo ha estado muy bien, muy metido en el partido y creo que el empate es lo más justo. Era un partido propicio para que no hubiese ocasiones porque los dos equipos han trabajado muy bien en defensa y ese respeto o esas ganas de sumar que teníamos los dos, creo que han prevalecido sobre intentar hacer buen fútbol o cosas que en este campo son complicadas. A mis jugadores no se les puede pedir más, son chavales que han pasado mucho, no os lo podéis imaginar, pero tenemos que seguir. Son profesionales aunque no vivan del fútbol, pero dentro del campo cuando se ponen la camiseta, sí lo son, y no se les puede pedir más”.