La Federación Andaluza de Cofradías de Pescadores (Facope) ha mostrado su decepción por el acuerdo alcanzado por el Consejo de Ministros de Pesca de la Unión Europea en relación a las posibilidades de capturas para el 2022 al entender que "no beneficia" a los profesionales del sector.

Así lo ha asegurado el presidente de la entidad, Manuel Fernández, a través de un comunicado, en el que ha lamentado que esos profesionales ven "cómo en 48 horas se decide la gestión de la pesca de forma obsoleta".

El resultado del consejo, ha indicado, "no ha sido satisfactorio ni para el Golfo de Cádiz, ni para el Mediterráneo".

En lo que respecta al Golfo de Cádiz, por tercer año consecutivo hay recortes entre otras especies, en la merluza del sur (-8 %), la cigala del sur (unidad "30" -5 %) y el lenguado (-5 %).

En cuanto al Mediterráneo, el reglamento de aplicación para demersales acuerda una nueva reducción del 6 %, pero que tomando como referencia los datos reales de los años 2015 al 2017 supone el 7,3 %; la suma de todos estos porcentajes conducen a un resultado total de reducción del 27,6 % desde octubre del 2020 hasta la actualidad.

Se reducen también los días de esfuerzo para la pesca de la merluza y el salmonete en el palangre de fondo, algo que desde Facope no se comprende y resulta inexplicable.

"Es inadmisible, inasumible e inaceptable esta gestión de posibilidades de pesca realizada por el Consejo de Ministros, ya que además a todo lo anterior hay que añadir las medidas técnicas de cierres de pesquerías y un límite de captura anual para todo el Mediterráneo de la gamba roja de 872 toneladas. No sólo se reducen días, sino capturas", ha apuntado Manuel Fernández.

No obstante, aunque lo acordado no es de buen gusto para el sector pesquero andaluza, desde Facope se valora el esfuerzo realizado por el ministro de Pesca, Luis Planas, así como su voto en contra, "aunque no haya sido capaz de convencer al resto del Consejo de Ministros con las peticiones del sector".

Los pescadores andaluces están "decepcionados" ante lo que supone "una total incertidumbre para la pesca y auguran las peores consecuencias de lo que denominan un desastre absoluto".

En definitiva, concluye Manuel Fernández, "otro varapalo para los marineros andaluces que tanto han contribuido en los peores momentos de pandemia y cuyo esfuerzo y servicio no ha sido puesto en valor como sector primario esencial de la sociedad, ha concluido.