En España, hay solo tres mitreos, en Tarragona, Lugo y Mérida, en este caso se encuentra tapado, pero en ningún caso vinculado a la estatua del dios
Las excavaciones llevadas a cabo en el yacimiento arqueológico romano de la villa de Mithra, en Cabra (Córdoba), han deparado el excepcional hallazgo de un mitreo, o zona destinada al culto al dios Mithra, cuya estatua fue descubierta hace unos 70 años.
En España, hay solo tres mitreos, en Tarragona, Lugo y Mérida, en este caso se encuentra tapado, pero en ningún caso vinculado a la estatua del dios, como sí sucede en Cabra.
El mitreo es de uso privado, de pequeñas dimensiones, de ocho metros de largo por menos de tres de ancho y, a diferencia del suelo del pavimento del resto de la villa, que es de mosaico, en este caso es de tierra y huesos.
Los huesos, según los arqueólogos, provienen de los sacrificios de los animales que eran ofrecidos al dios y que, una vez consumidos, eran depositados y enterrados como objetos sagrados.
El Mithra de Cabra se encuentra en el Museo Arqueológico de Córdoba y es una de las piezas de referencia de la instalación museística.
La declaración de BIC sitúa el origen de la villa, de uso residencial, en los siglos I-II después de Cristo, aunque cuenta con una serie de remodelaciones que se adscriben a los siglos III y IV, "de tipo peristilo, por la existencia de este que permite la distribución a su alrededor de las principales estancias, entre las que incluye unas termas, situada al Noroeste"
El alcalde de Cabra, Fernando Priego (PP) ha destacado este lunes a EFE que tanto los investigadores de la Universidad Carlos III como de la Universidad de Málaga que han participado en las terceras excavaciones del yacimiento han destacado este excepcional hallazgo.
Para el profesor Jaime Alvar, de la Universidad Carlos III, uno de los responsables de las excavaciones llevadas a cabo entre noviembre de 2022 y finales de enero de 2023, se trata de "algo insólito" en la península Ibérica, tras la disposición de la estatua del Mithra, el dios matando al toro, según ha explicado en la presentación del hallazgo.
El yacimiento fue adquirido por el Ayuntamiento egabrense en 2018, junto al terreno colindante, donde se ha llevado ahora la excavación y se ha producido el descubrimiento.