El portavoz del Partido Popular de El Puerto, Germán Beardo, tras visitar en el día de ayer la zona y hablar con vecinos y comerciantes lamenta que “De la Encina no haya planificado las obras de otoño con la suficiente antelación para que El Puerto no se convierta en una gimkana de calles cortadas”.

En este sentido, recalca Beardo, que “las obras de la calle Larga se sabían desde 2015, porque son una inversión prevista por el anterior equipo de Gobierno y no se entiende como pueden coincidir en el tiempo las obras de calle Larga, las del parking de Pozos Dulces y la rotonda del cementerio. Cualquier portuense que tenga que salir y entrar de la ciudad va a tener que cambiar el coche o el autobús por el helicóptero”.

Añade Beardo que “es una prueba más de la incapacidad de De la Encina y el bipartito PSOE-IU para gestionar la ciudad con un mínimo de sentido común”.

Comenta Beardo que “si ya es grave la falta de planificación para que no coincidieran en el tiempo tres obras que van a bloquear las principales arterias de salida y entrada de vehículos en la ciudad, más grave es que a las primeras de cambio, en la primera obra ni se avise a los vecinos, ni se comunique a los comerciantes ni haya un plan de reubicación de vehículos. De la Encina y Ojeda se han dedicado a poner 4 carteles y con eso pensaban que estaba todo solucionado”.

Añade el popular que  “cuando se hacen obras de este tipo, para perjudicar lo menos posible a los vecinos y comerciantes, primero se les comunica, se les hace participes para que el impacto sea el menor posible y se les ofrece alternativas de aparcamiento, por ejemplo a los que tienen garajes, como se hizo en la primera fase de las obras de calle Larga, reubicando de manera gratuita los vehículos en el parking de Pasarela. Nada de esto se ha hecho y los vecinos están indignados con razón”.

Finaliza Beardo afirmando que “De la Encina y el bipartito PSOE-IU dan muestras cada día de estar sobrepasados por la situación. No sólo han demostrado una incapacidad manifiesta para gestionar la ciudad sino que en cada asunto que afrontan meten la pata y los portuenses salen perjudicados, en este caso por la falta de planificación y comunicación en las obras de calle Larga”.