El presidente electo de EEUU, Barack Obama, nombrará hoy a su Consejo de Seguridad Nacional, que será decisivo a la hora de definir las estrategias de las Fuerzas Armadas.
El equipo de transición de Obama confirmó ayer en un comunicado que el presidente electo anunciará hoy lunes desde Chicago los cargos claves de su equipo de Seguridad Nacional, cuyo núcleo duro forman, además del comandante en jefe, el vicepresidente, los secretarios de Estado, de Defensa y del Tesoro y el consejero en esta materia.
Los medios de comunicación estadounidenses dan por hecho que Hillary Clinton será la próxima secretaria de Estado y que Robert Gates, el actual titular del Departamento de Defensa, permanecerá al menos un año más al frente del Pentágono. También que James Jones se convertirá en el consejero de seguridad.
Si se confirman las designaciones pendientes, Obama habrá optado una vez más por la experiencia de la “vieja guardia” de la política estadounidense, en lugar de por nuevas caras.
Pero es precisamente la sabiduría de Gates, Clinton y Jones lo que, según ciertos observadores, podría calmar a las voces críticas en las Fuerzas Armadas, que miran con recelo al próximo comandante en jefe, del que dicen que carece de experiencia militar, según subrayaba ayer el diario Washington Post.
Las recomendaciones de lo que ya ha sido denominado por algunos analistas como “triunvirato” serán especialmente importantes en un momento en el que la imagen de EEUU en el exterior está dañada.