Las demandas de los tres colectivos son bien conocidas. Los afectados por los impagos de las prejubilaciones quieren un compromiso real de pago tras la quiebra de la Apra Leven. Los trabajadores de la fábrica de Flex piden a las autoridades que no aprueben el expediente de regulación de empleo extintivo que supondría abrir el camino a las intenciones de la empresa: cerrar y llevarse la producción a Portugal. Y Astilleros, la carga de trabajo que les corresponde, el compromiso de financiación para los tres barcos que están paralizados y que se cumplan los compromisos con algunos empleados, unos despedidos y otros que no se han reincorporado.
La ocupación de la sede de la Consejería fue un pasito más en la concentración, donde había un millar de personas, según los sindicatos. Tras un rifirrafe con la seguridad y con la Policía, los manifestantes comenzaron a pasar en tromba y a entrar en la inmensidad burocrática de Torre Triana con el objetivo de llegar hasta la planta séptima, donde se ubica Economía, mientras coreaban gritos de protesta por los impagos y reivindicaciones de apoyo para Flex y Astilleros.
“Algún destrozo” hubo, decían las fuentes sindicales, que tienen claro que si no hay acuerdo en la reunión de hoy, seguirán protestando. Cada uno por su lado.
Reunión con los viceconsejeros
Según la responsable de Acción Sindical de CCOO, Miriam Pinillos, en la reunión de hoy entre los prejubilados y los viceconsejeros de Empleo y Hacienda se abordará también el futuro de Flex y de Astilleros. Será la última, advierte la sindicalista.
