Una fuente responsable del Ministerio del Interior saudí, citado por la agencia, declaró que siete policías y un hombre sufrieron heridas por los disparos de un grupo armado en la localidad de Al Auamiya, en la provincia de Al Qatif.
Entre las víctimas, hay también dos mujeres que se encontraban en un edificio vecino y dos agentes que recibieron el impacto de cócteles molotov.
La fuente indicó que la agresión, que tuvo lugar el lunes por la noche, fue lanzada por "un grupo de instigadores de la discordia y de los disturbios" en Al Qatif, donde la mayoría chií ha protagonizado protestas en los últimos meses.
"Algunos se trasladaban en motos, y comenzaron sus acciones azuzados por un país que procura alterar la estabilidad del nuestro, lo que supone una flagrante intervención en la soberanía nacional", aseguró en alusión al chií Irán.
Irán es acusado por muchos de sus vecinos, entre ellos Arabia Saudí, de apoyar a las minorías chiíes de la región contra sus gobernantes suníes.
El Ministerio del Interior advirtió de que las autoridades saudíes adoptarán "una fuerte posición contra quienes obedecen ordenes de sectores extranjeros que desean extender su influencia fuera de su estrecha dimensión".
En ese sentido, dijo que los instigadores "deben determinar de manera clara su lealtad con Dios y su patria o con ese país y su referente".
Por último, la fuente subraya que el Gobierno no aceptará que se ponga en peligro la seguridad del país y el pueblo, por lo que actuará con puño de hierro contra cualquiera que haya sido pagado o influenciado para cometer actos contra Arabia Saudí.
Por su parte, un habitante de Al Qatif dijo que el supuesto grupo de saboteadores no tiene vinculación con actividades de derechos humanos y por ello no se han ganado la simpatía de la población.
"Han propagado el caos y el pánico en el país. Si tenían demandas se supone que deberían actuar pacíficamente", concluyó la fuente.