Según aseguró ayer su presidente, Miguel Alberto Díaz, hasta el mes de marzo han acudido a este colectivo un total de 66 usuarios, por lo que “este año nos desbordará el trabajo”, dado que en todo el año 2009 fueron “163 los pacientes atendidas y, de ellos, 36 venían con sus familias”.De ellos, 45 fueron mujeres y 118 hombres.
Con respecto a los datos de 2009, Díaz incidió en que “el 90 % de los usuarios no padecían ninguna enfermedad de transmisión sexual ni VIH” aunque “se incrementaron las patologías duales asociadas al consumo de estupefacientes”.
De los pacientes atendidos, el 72 % eran mayores de años y, por sustancias, el 64 % era el hachís, el 48,35 % cocaína y el 16 % restante de otras sustancias. También, “el 90 % no tenía causa penal ni judicial pendiente.