Hogar de civilizaciones desarrolladas desde antes de la romanización, la provincia de Cádiz atesora por eso un resto arqueológico y un monumento histórico bajo cada zanja, a cada patada. El catálogo de Bienes de Interés Cultural (BIC) es extensísimo: 449 enclaves en toda la provincia tienen esa catalogación, de los que 400 están bajo régimen de protección especial. Pero el estado de conservación de muchos de esos monumentos o enclaves no parece corresponderse con el grado de protección administrativa con el que cuentan.
Asociaciones como la de Difusión e Investigación del Patrimonio Cultural de la Provincia de Cádiz (Adip), denuncian el estado de “dejadez” administrativa que amenza la conservación del patrimonio histórico de la provincia. Antonio de la Cruz, investigador de la Adip critica esta situación y concluye que “no hay interés por conservar el patrimonio de esta provincia”, que entiende que es “importante y digno de conservar”. De la Cruz habla concretamente del Teatro Romano de Cádiz: “no entiendo cómo un hallazgo de esa magnitud no tiene aún catalogación de BIC, cuando está en un entorno [el casco histórico de Cádiz] que sí lo es”. En las inmediaciones del Teatro Romano, en zona protegida, yace a la interperie un conjunto de cuatro columnas de mármol blanco del siglo XVII, de alto interés escultórico porque fueron talladas por el italiano Andrea Andreoli. A pesar de que las columnas también están catalogadas como BIC, están abandonadas en ese solar del Campo del Sur.
Para De la Cruz, conservar tal cantidad de patrimonio “requiere apoyo público”, algo que a la provincia no llega: “si la Giralda estuviera en Cádiz, estaría abandonada y en ruinas”.
La delegada de Cultura de la Junta en la provincia, Remedios Palma, asegura que “es cierto que es responsabilidad de la Junta atender a la conservación del patrimonio” y que la administración cuenta con “un importante equipo técnico que vela por el mantenimiento de nuestro legado”; pero reconoce también que “no podemos siempre anticiparnos al deterioro de los monumentos”, y ha añadido que “si eso fuera así, que es lo que nos gustaría, sería señal de que disponemos de los recursos económicos suficientes”. Unos recursos que “por la crisis” se han visto diezmados en detrimento de la conservación.
En cada pueblo de la provincia hay un BIC, algunos bajo tutela de la Junta y otros tantos en propiedades privadas. Palma ha insistido en que “es responsabilidad” de la Junta también “concienciar a los propietarios de la importancia y la necesidad” de que contribuyan a conservar los bienes históricos que estan dentro de sus propiedades.
Ese es el caso del yacimiento de Asta Regia, en la localidad de Trebujena. Los restos hallados datan desde el Neolítico hasta la época islámica. Historiadores e investigadores indican que la zona arqueológica, declarada BIC en el año 2000, es de una importancia destacada. Pero se encuentra en uan finca privada sobre la que no existe proyecto de expropiación por parte de la Junta para su excavación y puesta en valor.
En Algeciras, el Fuerte del Tolmo, en estado ruinoso, espera aún “sin fecha”, se quejan los conservadores, los trabajos de restauración y consolidación de la Junta. Y en la misma localidad, el horno romano de El Rinconcillo permnece soterrado y sin proyecto de excavación conocido.
Pero tal vez, los casos más evidentes de esa “dejadez” que denuncian investigadores e historiadores como De la Cruz son los de los conjuntos rupestres de Los Barrios y Benalup. En el primero, los Tajos de Bacinete y la Cueva del Pajarraco presentan un estado de “deterioro notable” que amenaza la conservación de las pinturas rupestres de los abrigos rocosos.
En Benalup-Casas Viejas, el importante hallazgo de las pinturas del Tajo de las Figuras llevó a su restauración en el año 2005, pero la falta de recursos y de labores constantes de conservación ha llevado al cierre de este conjunto prehistórico que el público no puede visitar desde el año 2008.
Los 10 puntos negros del patrimonio histórico
1. Cádiz. El Teatro Romano no está protegido como Bien de Interés Cultural, “algo incomprensible”, aseguran.
2. Algeciras. La fortificación militar, declarada BIC en 1985, está aún a la espera de ser restaurada por la Junta de Andalucía.
3. Algeciras. El horno romano de El Rinconcillo, declarado BIC en 1969, se encuentra hoy soterrado y no hay proyecto de excavación.
4. Barbate. La célebre torre fue parcialmente derribada en 1860 cuando se edificó el Faro de Trafalgar, usando piedras de la vieja torre.
5. Los Barrios. El conjunto rupestre presenta hoy una protección “muy deficiente” que amenaza la conservación de sus pinturas.
6. Los Barrios. Abrigo rocoso usado en la Edad del Bronce, fuertemente deteriorado por las obras del Embalse de Charco Redondo en los 80.
7. Benalup. En 2005 se realizaron trabajos de restauración sobre las pinturas, pero la falta de conservación obligó el cierre al público en 2008.
8. Bornos/Espera. El yacimiento íbero-romano ha sufrido expolios en los años recientes, una práctica que ha sido vigilada por el Seprona.
9. Trebujena. Yacimiento de gran importancia, se encuentra en una finca privada que no se prevé expropiar para su excavación
10. Jerez. Actualmente en proceso de restauración y consolidación. Se prevé reabrirla a finales de año, tras un intermitente proceso de recuperación.