Ariza hizo entrega del documento sobre las previsiones de ingresos y gastos para el año próximo a fin de que la oposición pueda estudiarlo y efectuar las aportaciones que considere oportunas. No obstante, Romero mostró su disconformidad respecto al anteproyecto y remitirá un escrito a la alcaldesa indicando su valoración al respecto.
Por su parte, la primer edil valoró de manera positiva el encuentro con ambos portavoces y les pidió que hiciesen las aportaciones que crean convenientes y que se estudiarán desde el área de Hacienda. “La idea es hacer unos presupuestos que cuenten con el mayor consenso posible y que sean acorde con la realidad que vivimos”, apuntó Ariza.
El anteproyecto para 2010 contempla una disminución de un 30% con respeto al de 2009. El presupuesto general consolidado de 2009, en el que se incluyen también los de las empresas y fundaciones municipales, ascendía a 88.800.000 euros y el del Ayuntamiento, a unos 65 millones.
El objetivo del área de Hacienda es llevar a cabo unos presupuestos “participativos y realistas, que contribuyan al desarrollo económico y social del municipio, y que sirvan para resolver problemas y satisfacer las demandas más acuciantes de los ciudadanos, en lo que se refiere a atención, servicios e infraestructuras”.
Las directrices marcadas para la redacción del documento son las de incidir en la reducción de los gastos, especialmente los corrientes, sin mermar los destinados a Educación, Cultura y Políticas Sociales, y mantener y promover inversiones generadoras de empleo, teniendo en cuenta el descenso de la capacidad recaudatoria, como consecuencia de los efectos de la situación de crisis general.