Repsol y Magtel se reparten por igual el 66,6 por ciento del negocio de las plantas fotovoltaicas que se están desarrollando actualmente en el término municipal de Jerez.
En total son hasta quince las plantas que se encuentran ejecutándose o pendientes de la concesión de los diferentes permisos administrativos después de que Magtel haya incorporado un nuevo proyecto a su ya de por sí importante presencia en la zona.
En concreto, el Boletín Oficial de la Provincia de Cádiz (BOP) publicaba ayer el anuncio de la Consejería de Hacienda y Financiación Europea de información pública para la autorización administrativa previa y la autorización ambiental relativo a la solicitud cursada por Odin Solar S.L. para el desarrollo de la planta fotovoltaica Lobatón, de 31 megavatios de potencia.
Se da la circunstancia de que Odin Solar comparte domicilio social con Hermod Solar o Loki Solar, que precisamente ayer publicaban en el BOP anuncios similares para el desarrollo de sendas plantas en Jerez.
Todas estas sociedades pertenecen a Magtel, con sede en el Parque Aeronáutico Aerópolis de San José de la Rinconada, en Sevilla.
De estas dos plantas sí se tenía noticias, siendo su potencia de 50 y 27,7 megavatios, respectivamente.
Se cumple por tanto con el propósito de trocear estas instalaciones de energía fotovoltaica para que no generen más de 50 megavatios, lo que facilita su tramitación administrativa, tal y como han venido advirtiendo desde Ecologistas en Acción.
Esta organización considera “urgente” desarrollar una regulación y planificación adecuadas para evitar que la “magnífica oportunidad” que representan las renovables “sólo sirva para enriquecer a unas pocas empresas”, como son los casos de Repsol o Magtel, que están controlando las dos terceras partes del negocio en Jerez a costa de sectores que pueden verse “seriamente afectados” por el desarrollo de estos complejos, “como la agricultura, la ganadería extensiva e incluso el turismo”.
Recientemente, Ecologistas en Acción ponía en duda que este tipo de plantas pudiera generar empleo una vez en funcionamiento, advirtiendo de que una instalación de 50 megavatios apenas precisa de un servicio de limpieza y vigilancia, ya todo lo demás está automatizado.
Esas advertencias han caído por el momento en saco roto.