La Fiscalía de Málaga ha elevado a dos años de prisión la pena solicitada para el exalcalde de la localidad malagueña de Tolox Juan Vera --que se presentó por Convergencia Andaluza-- en cinco causas por delito urbanístico que han sido juzgadas la pasada semana, según han confirmado a Europa Press fuentes judiciales.
El Juzgado de lo Penal número 4 de Málaga acogió los días 17, 18 y 19 pasados un total de seis juicios contra Vera por concesión de licencias supuestamente irregulares, permisos con los que se daba vía libre a la construcción de viviendas en distintas zonas del municipio de Tolox.
Así, en cinco de las vistas orales celebradas, en las conclusiones provisionales, la acusación pública modificó su petición inicial de un año de prisión por la de dos años de cárcel, según las fuentes. Asimismo, en uno de los juicios, finalmente el ministerio fiscal retiró la acusación.
Quedan aún por celebrar en el mismo juzgado otras dos vistas orales, también por delitos contra la ordenación del territorio, que se han fijado para la próxima semana, en concreto para el miércoles día 25.
Inicialmente, Vera fue absuelto en algunas causas urbanísticas, pero actualmente cuenta con cinco sentencias condenatorias firmes, tras haber sido confirmadas por la Audiencia, todas por delitos contra la ordenación del territorio y por juicios celebrados en el Juzgado de lo Penal número 8 de Málaga.
Así, en las ejecutorias ya iniciadas por el juzgado, el fiscal ya se ha opuesto a que se suspenda el ingreso en prisión del exregidor, al considerar que Vera acumula ya varias penas de cárcel y que tiene otras sentencias no firmes pendientes de que se resuelvan los recursos correspondientes.
Vera anunció su decisión de dimitir como alcalde después de que la Audiencia malagueña confirmara la primera de las condenas. En cada una de las resoluciones condenatorias que tiene, ratificadas por distintos tribunales, se le ha impuesto una pena de 15 meses de prisión y 10 años de inhabilitación para empleo o cargo público.
Los tribunales han ratificado que el entonces regidor concedió licencias de obra en suelo no urbanizable para construir viviendas "a pesar de constarle" que no se ajustaba a la legalidad. Se declara probado que el alcalde tenía la intención de proceder al crecimiento urbanístico "sin respetar las normas vigentes" en el municipio.
El exalcalde ha vuelto a asegurar esta semana ante la jueza que "nunca" pensó que las licencias urbanísticas que otorgó pudieran ser ilegales sino, no las hubiera firmado; que no dio el visto bueno a ningún permiso que llevara un informe desfavorable y que en ningún momento se le advirtió de la supuesta irregularidad.
Asimismo, afirmó que "confiara o no" en los técnicos "tenía que aceptar lo que ellos decían en sus informes", negando que diera indicaciones tanto a la secretaria como al arquitecto municipal, señalando que no revisaba los expedientes porque no era su competencia.