La secretaria de Seguridad Nacional, Jannet Napolitano, compareció ayer ante los medios, en la Casa Blanca, para informar de esta medida, que permitirá al Gobierno liberar los recursos necesarios para que los estados y municipios puedan hacer frente a la enfermedad.
“Parece más severo de lo que es, pero el declarar la emergencia es un proceso estándar que nos permite liberar unos recursos para la prevención, medicación y diagnostico que, de otra manera, no podríamos utilizar”, dijo Napolitano.
Como parte de esta medida, cerca de 12 millones de dosis de Tamiflu –oseltamivir, el medicamento antiviral más utilizado– se sacarán de los depósitos federales donde están almacenados y se distribuirán donde sea necesario, aunque con prioridad en los Estados donde ya se han detectado casos.