Fuentes de la lucha antiterrorista aseguraron a Efe que tanto la Guardia Civil como las fuerzas de seguridad francesas han intensificado en los últimos meses sus investigaciones en suelo francés para impedir una hipotética reorganización de los Grapo.
Durante varias semanas, efectivos de la Guardia Civil, asistidos por gendarmes franceses, han rastreado sin éxito las faldas del Mont Ventoux, en el sureste de Francia, lugar en el que según Silva Sande la banda terrorista enterró el cadáver del empresario secuestrado en 1995.
Ha sido ahora cuando agentes del instituto armado, en colaboración con la Policía Nacional Francesa, han localizado en un bosque próximo a la localidad de Maisse, cerca de París, dos zulos de los Grapo con armas, explosivos y detonadores en perfecto estado de conservación.
El primer zulo, compuesto por dos bidones herméticamente cerrados contenía veinte iniciadores de explosivos, cuatro pistolas, dos revólveres y diversa munición.
El segundo escondite de los Grapo, que estaba formado por un único bidón, guardaba 8,1 kilos de sustancias para la fabricación de explosivos y cinco temporizadores.
El pasado año fue hallado otro zulo en un bosque cercano a la localidad francesa de Fontainebleau, que contenía cuatro pistolas automáticas, un revólver, una pistola ametralladora, un silenciador, seis kilos de explosivos y abundante munición.