La vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Economía y Hacienda, Elena Salgado, aseguró que la nueva Ley de Economía Sostenible, cuyo anteproyecto aprobó hoy el Consejo de Ministros, servirá para generar "actividad, empleo, riqueza y bienestar" en términos de país.
"No puede hablarse de coste, sino de impulso a la actividad", señaló Salgado en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, donde aseguró que se trata de un proyecto "extraordinariamente ambicioso", que contempla un gran número de reformas "importantes" y antes de ser aprobado se someterá a información pública y se trasladará a agentes sociales y partidos políticos.
Según Salgado, el anteproyecto forma parte del compromiso que hizo público el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, durante el debate sobre el estado de la Nación de crear un nuevo modelo económico más sostenible.
En este sentido, destacó que el PSOE siempre ha sido un partido reformista y que los gobiernos socialistas han sido los que han desarrollado las grandes reformas del país durante la etapa democrática.
A su parecer, la nueva Ley supone un "proyecto de país" de cara al año 2020, por lo que requiere la implicación y "responsabilidad" de otros grupos políticos "de cualquier color", al trascender al periodo de gobierno socialista.
En este sentido, destacó la voluntad del Gobierno de abrir un "amplio debate" sobre los contenidos del anteproyecto, que permita además incorporar las eventuales sugerencias de los agentes antes de que el texto llegue al Congreso de los Diputados.
De hecho, admitió que el actual texto puede sufrir cambios antes de llegar al Parlamento a su paso por el Consejo Económico y Social y el Consejo de Estado, ya que queda "un amplio camino" y el Gobierno se ha mostrado dispuesto a recibir sugerencias.
En este sentido, la vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega, explicó que el anteproyecto se someterá ahora al periodo de consultas y que después deberá volver al Consejo de Ministros, que tendrá que aprobar el texto que irá finalmente al Parlamento.
Sin embargo, Salgado descartó que la reunión que va a mantener esta tarde con los agentes sociales vaya a ser "una negociación", sino que el encuentro servirá para transmitirles toda esta información sobre el anteproyecto. "En absoluto será una negociación", subrayó.
Sobre cómo afectará la nueva ley al crecimiento del PIB y del empleo, admitió que aún no se han realizado los cálculos en términos de empleo, aunque sí se harán en los próximos días tras dialogar con las empresas. Aún así, aprovechó para recordar que las cifras de desempleo seguirán siendo altas durante los dos próximos años.
FONDO DE 20.000 MILLONES.
Por otro lado, Salgado recordó que la nueva ley contempla la creación de un fondo que movilizará unos 20.000 millones de euros destinado a proyectos de innovación, tecnología, energía renovable y ahorro energético, que se financiará a través del ICO y las entidades financieras dispuestas a participar.
En este sentido, Salgado aseguró que no se obligará a las entidades a participar en este proyecto, aunque la pretensión del Ejecutivo es que lo hagan en un 50%, para lo que instrumentará incentivos a la participación y ofrecerá condiciones favorables a las entidades, así como proyectos rentables. "En las primeras conversaciones, las principales entidades manifestaron su disposición", adelantó.
Sobre las exigencias de transparencias en las remuneraciones, Salgado explicó que no han querido ir más allá y limitar los salarios porque el sector financiero español no ha adolecido de los problemas de otros países y porque el Gobierno no quería ser el primero en establecer normas de ese tipo. "Si en otros países se decide, no dude de que así lo haremos", aseguró.
Salgado aseguró también que los cambios fiscales sobre algunas retribuciones no tendrán una repercusión "significativa" en los ingresos del Estado y explicó que el motivo de esta iniciativa es hacer un esquema "más justo y razonable". Asimismo, aprovechó para descartar nuevos incrementos impositivos a través de la nueva ley.
ESPÍRITU CONSTRUCTIVO, DE DIÁLOGO Y DE CONSENSO.
Por su parte, De la Vega, aseguró que el anteproyecto de ley contempla medidas "muy ambiciosas" que el Gobierno encara con un "espíritu constructivo, de diálogo y de consenso", puesto que forma parte del proyecto reformista anunciado por el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, para promover un modelo económico "más justo y sostenible".
En este sentido, recordó que el jefe del Ejecutivo explicará el anteproyecto de ley a los grupos políticos la próxima semana en el Congreso y a las comunidades autónomas en la Conferencia de Presidentes que se celebrará el próximo 14 de diciembre, a la que también asistirán los agentes sociales.
"Queremos contar con todos y en esa tarea haremos todo lo que esté en nuestra parte", señaló De la Vega, quien aseguró que también habrá cita con el líder de la oposición, Mariano Rajoy, y confió en que este encuentro pueda celebrarse en el mes de diciembre.