Pablo García Baena (Córdoba, 1921) reúne en Rama fiel una antología con lo mejor de su producción poética, comprendida entre 1938 y 2008.
Este “libro definitivo” incluye también poemas inéditos, además de fotografías, dibujos, reproducción de tapices y textos a mano del autor. Esta edición, que sale con motivo de la entrega del XVII Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana al poeta impulsor del Grupo Cántico, es, según sus propias palabras, “el libro entero de mi vida, casi un diario”.
“Poeta de la tradición clásica”, como detalló ayer en rueda de prensa el miembro del jurado Luis Antonio de Villena, que mezcla la “tradición pagana con elementos católicos singulares”, además de otros ingredientes como el realismo, el barroco o el manierismo, con especial atención a los elementos simbolistas, García Baena es uno de los autores del Grupo Cántico, que reúne una nómina de artistas como Ricardo Molina, Julio Aumente, Juan Bernier o Mario López.
“En los años turbios, la única bandera libre que había, era Cántico, una colonia poética”, explicó el autor, que ayer recibió el Premio de manos de Doña Sofía, durante un acto celebrado en el Palacio Real de Madrid, que estará amenizado por un concierto recital y en el que se llevará a cabo un recuerdo especial a Ángel González y otros poetas fallecidos.
Según detalló, “la poesía no se puede entender si no es a través de la vida”. “Los poetas del canto se propusieron vivir y seguir siendo felices. Cuando el mundo empezó a ir por otra parte, dejaron de escribir”, apuntó el poeta, recordando que los autores reunidos en Cántico “hacíamos poesía como Dios o el demonio nos hacían entender”.
“Callaron muchos años hasta la resurrección de los novísimos”, agregó un autor que considera que “lo importante es la vida, la poesía vendrá luego”.
Respecto a Rama Fiel, García Baena afirmó que no es sólo un libro de poesía. “Es el libro entero de mi vida. Están mis amigos, mis tapices, mis dibujos... Es casi un diario”, subrayó, reconociendo que este texto le producía “incertidumbre”. “Es como si me viera desde el panteón de los ilustres, pero estoy vivo, y todavía puedo dar mucha guerra”, bromeó el escrito cordobés, que lleva 70 años dedicado a la poesía.
“Abrumado”, desde que el pasado mes de mayo supo que era el galardonado con el Premio Reina Sofía, que en anteriores ediciones ha recaído en poetas como Alvaro Mutis, José Angel Valente, Antonio Gamoneda, José Hierro o Blanca Varela.