En un comunicado difundido por la agencia oficial de noticias SANA, el Gobierno ha asegurado que unos "terroristas" han matado a varios residentes de una granja en el barrio de Deir Balba, tras haber convertido esa instalación en un "centro de tortura y asesinato de ciudadanos".
Siempre según el relato gubernamental, en la granja se han hallado "cuerpos mutilados" y "herramientas que han sido usadas para la tortura, el asesinato y la mutilación" de personas previamente secuestradas, así como "materias primas para fabricar artefactos explosivos".